La tumba del cervecero del Faraón hace 3.000 años descubierta en Egipto

En el Antiguo Egipto la cerveza era una de las bebidas mas apreciadas, entienden los historiadores, quienes interpretan la calidad de la tumba hallada como muestra clara del reracionamiento directo entre el “hijo del Sol” y el fabricante del dorado fermento.

La tumba pertenece al maestro cervecero Jusum-Him-Heb, que vivió hace tres milenios, y fue encontrada mientras el equipo de la universidad japonesa de Weseda realizaba labores en el sepulcro de un funcionario de la corte de Amenhotep III de la XVIII dinastía.

La rica sepultura, con dos salas y una cámara mortuoria, tiene bellísimas pinturas que han superado en buena forma el paso de los siglos, que revelan mucho de la vida diaria de los egipcios, principalmente en los temas referidos a la producción de cebada y todo lo vinculado con la producción cervecera.

Una bebida en ofrenda a la diosa Mut

Jiro Kondo, jefe de los arqueólogos japoneses ha explicado que las pinturas muestran ademas al cervecero y toda su familia, rindiendo tributo a varios dioses, principalmente a la diosa Mut, vinculada directamente con la cerveza.

Los murales muestran distintos aspectos de la fabricación cervecera, marcando a decir de los entendidos que la misma era probablemente de menor tenor alcohólico a la que actualmente conocemos, tambien con un sabor algo dulce y seguramente espesa.

A diferencia de las tumbas de faraones que muestran toda la vida de los dioses vinculada con el mismo faraón y su familia, la del cervecero –al igual que la de otros personajes importantes de la corte– tiene escenas de la vida cotidiana que ayudan a comprender como fue la vida de las márgenes del Nilo hace tres mil años.

El Ministerio de Antigüedades de Egipto ha reconocido la importancia del descubrimiento y estudia ya la posibilidad que en un futuro la tumba del cervecero pueda ser exhibida a los visitantes.