El origen del Día del Padre

El verdadero origen del Día del Padre surge en Estados Unidos el 19 de junio de 1909, cuando a una mujer, llamada Sonora Smart Dodd, se le ocurrió homenajear a su gran padre, Henry Jackson Smart.

El mismo había participado en la guerra civil, un hombre viudo muy luchador. Su esposa murió mientras daba a luz a su sexto hijo. Por tanto, Henry Jackson se hizo cargo de la educación y del porvenir de sus seis hijos, criándolos en una granja rural en el estado de Washington, haciendo como muchos hoy en día, el rol de padre y de madre a la vez.

Al crecer Sonora Dodd se dio cuenta lo que su padre había hecho por ella y sus cinco hermanos, fue todo un ejemplo a seguir. Vio a su padre como un hombre valeroso, cariñoso y desinteresado, que realizaba lo que fuese necesario para salir adelante junto a su familia.

Su padre había nacido en junio, y por esto Sonora escogió el 19 de junio de 1910 como fecha para homenajear y celebrar el Día del Padre, en especial al suyo.

Sanora Dodd realizó la propuesta de festejar el Día del Padre en el año 1909 pero no obtuvo respuestas ni noticias por la misma, Un año después en Sponkane, Washington, se celebró por primera vez en el mundo el Día del Padre.

La fecha se fue institucionalizando en muchas ciudades linderas y en 1924 el presidente Calvin Coolidge respaldó la idea de establecer un día nacional del padre. Finalmente en 1996 el presidente Lyndon Johnson firmó una proclamación en donde declaraba al tercer domingo de junio como Día del Padre en los Estados Unidos.

Con la fecha establecida el festejo recorrió el mundo, llegando a Europa, Asia y América Latina. Hoy por hoy festejamos el Día del Padre con un fuerte agregado «el consumo», pero en sus inicios fue puramente una muestra de cariño y agradecimiento a ese padre ejemplar que deja todo por sus hijos.