Dos marchas masivas y un mismo reclamo: ¡Basta de violencia contra las mujeres!

En el marco del Día Internacional de Eliminación de la Violencia hacia las Mujeres, que se celebra cada 25 de noviembre, este domingo se realizó en Montevideo una gran movilización con dos marchas que se fusionaron para la lectura de la proclama.

Una de ellas, convocada por Mujeres de Negro, partió de la Plaza Independencia con su clásica performance: la multitud organizada en tres filas, todas y todos vestidos de negro y avanzando en silencio.

Este año muchas personas también se vendaron los ojos y no faltaron las fotos de mujeres asesinadas por la violencia machista.

La marcha fue encabezada por una mujer vestida de blanco con una balanza para mostrar la desigualdad entre los géneros y entre la falta de presupuesto para poder implementar la ley integral contra la violencia de género que ya fue aprobada. De un lado estaba el símbolo femenino y del otro el dinero, que hacía más peso.

La otra marcha, convocada por la Intersocial Feminista, avanzó desde la explanada de la Universidad de la República con otro tipo de manifestación, más colores, carteles de frases contra la violencia de género, el acoso callejero y el patriarcado.

Avanzaron hasta la Intendencia de Montevideo entre cánticos como «Mujer escucha, únete a la lucha», o «América Latina va a ser toda feminista». Tampoco faltó el clásico «somos las nietas de todas las brujas que nunca pudieron quemar».

Las formas de manifestarse fueron distintas, pero el reclamo el mismo: el fin de la violencia de género y más presupuesto para implementar la ley.

La lectura de la proclama fue conjunta, los dos ríos de gente que componían ambas marcha se unieron en la explanada de la IM.

«Somos la voz de las que ya no tienen, de las que han sido silenciadas», expresaba la proclama que exigía mejores servicios y mayor presupuesto para atender la violencia contra las mujeres en todas sus expresiones.

Las organizaciones feministas reclaman «prevención para las mujeres que están en situación de violencia, que es lo que falta y nos falla, las denuncias no alcanzan para evitar su asesinato. Hay mas cosas que se precisan».

Y destacan la necesidad de «generación de recursos genuinos y la reordenación de gastos que permitan instalar una red efectiva de trabajo y protección para las mujeres que sufren violencia de género, tanto en Montevideo como en el Interior del país. Salvo las capitales o algunas ciudades importantes, las mujeres están totalmente desportegidas».

También consideran que es urgente «el acceso a un sistema de justicia que no revictimice a las mujeres y a sus hijos e hijas, y ejecute con urgencia lo que la ley ordena».

Y se exige un sistema que asegure los servicios de Salud Sexual y Reproductiva, más allá de quienes presentan objeciones de conciencia.

«Reconocimiento de la condición de mujer para las compañeras en situación de discapacidad y su derecho a la misma libertad de elección como todas las mujeres. Aborto legal para todas las mujeres migrantes», agrega la proclama que pide poner fin «a la violencia racista y sexista en los espacios institucionales» así como a «los discursos de odio que alimentan la violencia contra las personas trans y de la diversidad sexual».