Directora de Primaria: «En la comunidad educativa no hay miedo, lo que hay es dolor”

La presidenta de Educación Inicial y Primaria, Irupé Buzzetti, se refirió al episodio de violencia ocurrido en la escuela 251 de Montevideo que terminó con el procesamiento con prisión de una madre que agredió a una maestra y la directora de esa institución.

En conversación con Informe nacional Buzzetti resaltó que en la comunidad educativa no hay “miedo”, “lo que hay es dolor”.

 

A su vez relató que lo que más les impactó a las maestras y a la directora que presenciaron el hecho fue «la cara de los niños, la cara de los alumnos que miraban todo ese episodio”, que eran más de 200 y no podían hacer nada «porque dentro de las edades de los que estaban no podían hacer absolutamente nada con respecto a lo que estaba pasado», explicó.

Buzzetti reiteró que no hay miedo sino dolor y recordó que la maestra agredida dejo bien claro que «no es el dolor físico lo que me tiene mal, me tiene mal el haber visto la cara de los niños, me tiene mal toda la entrega que tenían esas maestras con esa mamá, lo que hace que resulte incomprensible» su accionar, «es una mamá que está contenida con otras instituciones además de la escuela» agregó.

En ese sentido dijo «son situaciones que no se pueden prever, que así yo tuviera un psicólogo parado en una escuela no se puede prever lo que pasó, no se pudo prever la primera agresión ni se pudo prever que iba a volver«, dijo.

La jerarca de primaria informó que hubo una jornada de reflexión tras el episodio no sólo en la escuela donde ocurrió este episodio de violencia sino en todas los centros donde las maestras conversaron con los padres que venían a la escuela y con los niños acerca de estos episodios.

Sobre esas conversaciones precisó que se les recordó a las familias que cuando los niños comienzan la escuela empieza una etapa de vinculo entre ambas partes que es necesario que exista porque “no hay escuela si no hay familia; la escuela trabaja con la familia en todos los temas».

Finalmente reflexionó que en algunas familias, en algunos casos “hay vulnerabilidades que hacen que descarguen sus emociones en un lugar donde le están dando todo”, y resaltó el compromiso de las maestras, de los auxiliares de servicio y de todos los que forman parte de la escuela.

Dos de los hijos al INAU

Por otro lado el juez de Familia Especializado, Pablo Dalera, decidió este sábado que dos de los hijos de la mujer que agredió a docentes de la escuela 251, queden bajo la tutela del Instituto del Niño y Adolescente del Uruguay (INAU), mientras que los otros cuatro vivirán con su abuela paterna, informó El País.

En conversación con El Observador el juez Pablo Dalera explicó que se constató que hubo «violencia intrafamiliar» y que eso fue lo que determinó su decisión. A su vez solicitó asistencia psicológica para todos los niños.

Según precisa El Observador la decisión del juez de separar a los niños de esta manera se dio porque, tanto en el caso de la menor, de tres meses, como del mayor, de 11 años, no se encontró un familiar directo con el cual dejarlos.

El País por su parte detalla que los técnicos de INAU y Primaria están ajustando los detalles sobre cómo continuar el apoyo a los niños, asegurar su escolarización y protección básica.