Profesionales de ANTEL ampliaron denuncia judicial contra el directorio
El sindicato de profesionales de ANTEL (CIPA), ratificó y amplió la denuncia contra el directorio del ente por un delito de espionaje, en tanto afirma que correos electrónicos enviados por el sindicato fueron obtenidos por los directores a través de la violación del secreto implícito que tienen.
Los dos correos, distribuídos anónimamente por el sindicato, habrían sido rastreados por orden del directorio, y sobre ellos se interrogó al presidente del gremio, Wilson Flores.
Las instancias judiciales se cumplen en la sede penal de 12º turno a cargo del juez Nelson Dos Santos, que afirmó estar en la “etapa de investigación” del caso, por lo cual ha hecho comparecer a las dos partes en litigio.
Distintos criterios según quien se trate
El sindicato que nuclea a los gerentes, jefes y profesionales de ANTEL, extendió la denuncia más allá de la justicia, a los ministerios correspondientes y otras entidades vinculadas a la protección de los clientes.
Para el sindicato, ANTEL actuó en forma diametralmente opuesta cuando se efectuó una denuncia que implicó una investigación administrativa en la Facultad de Medicina, donde se negó de plano a entregar información vinculada a correos electrónicos incluso bajo una intimación judicial al respecto.
El CIPA recordó que en esa oportunidad ANTEL rehusó entregar la información en tanto implicaba “una flagrante violación al derecho a la intimidad y un atentado contra la vida pública de sus clientes” y violaba incluso el artículo 28 de la Constitución donde se especifica que la correspondencia epistolar, telegráfica, “o de cualquier otra especie es inviolable”.
En la argumentación de aquella oportunidad el ente sostuvo que “el secreto de la comunicación ampara tanto el contenido de la misma como la identificación de su entorno que revele cualquier aspecto de la intimidad del sujeto o del contenido de la comunicación”.
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