A pesar del “Compromiso por las Mujeres”, hombres ocupan 8 de cada 10 puestos de jerarquía en el Gobierno

La segregación por género es una realidad nacional e internacional, y es transversal tanto a los sectores públicos como a los privados y en prácticamente todas las actividades laborales y políticas.

En las altas esferas de las jerarquías, las diferencias son fuertemente marcadas y se constata que los hombres siguen siendo el género que predomina muy a pesar de que existan mujeres totalmente capacitadas para ostentar altos cargos.

El informe “Brechas en el acceso a puestos de decisión en la Administración Central 2020”, elaborado por el Laboratorio de Innovación y Observatorio de la Función Pública de la Oficina Nacional del Servicio Civil (ONSC), encontró que en los niveles de mayor jerarquía (cargos políticos y de particular confianza) el 78% de las funciones de conducción son ocupadas por hombres y el 22% por mujeres. En los restantes niveles la proporción se acerca a la paridad, con un 55% de hombres y un 45% de mujeres ejerciendo la conducción.

«Se hace visible la existencia de la segregación horizontal, asociada a los roles de género tradicionales, presentando una mayor concentración de mujeres en los sectores de actividad considerados históricamente como femeninos», agrega el documento.

Sí se constata una mayor presencia de mujeres en áreas como salud, enseñanza y servicios sociales, así como en los escalafones administrativos y de docencia. Asimismo se encontró que hay menos brecha -aunque aún existe- en escalafones técnicos y profesionales, tanto ejerciendo funciones de conducción como en la totalidad de los vínculos, producto de la mayor formación terciaria de las mujeres.

“Compromiso por las mujeres”

En noviembre de 2019, en lo que entonces se proyectaba lo que se convertiría en la coalición multicolor gobernante, mujeres representantes de los partidos políticos que la conforman presentaron el ‘Compromiso por las mujeres’, complementario al plan de gobierno de Luis Lacalle Pou llamado ‘Compromiso por el País’.

El documento de doce páginas fue entonces presentado por mujeres de alto perfil en la coalición: Beatriz Argimón, Gloria Rodríguez (Partido Nacional), Andrea Maddalena (Partido Colorado), Mónica Bottero (Partido Independiente), Irene Moreira (Cabildo Abierto), fueron algunas dirigentes que participaron de la firma.

Proponía tres ejes temáticos: el primero era el «trabajo, igualdad salarial, capacitación y garantía en los cuidados», que se ampliaba diciendo: «La brecha salarial entre hombres y mujeres, según informe del BID, alcanza el 26%; el desempleo en el país en el tercer trimestre de 2019 es de 9,2% pero en elcaso de las mujeres llega al 10.9%».

Decía que la coalición se comprometía a promover la igualdad salarial entre hombres y mujeres «para evitar cualquier forma de retribución discriminatoria entre géneros, tanto en el sector privado como público». También ofrecía «brindar apoyo especial para mujeres jefas de hogar y víctimas de violencia de género en la creación de emprendimientos enmarcados en pequeñas y medianas empresas».

En otros puntos hablaba de «expandir y profundizar» la implementación del sistema de cuidados, aumentar la cobertura de atención a la primera infancia, evaluar la implementación de un sistema compartido de licencia por paternidad y maternidad, promover estudios estadísticos del aporte que realizan las mujeres al PIB nacional, para conocer lo que efectivamente aportan las mujeres al país, y muchas ideas más.

En cuando a la violencia de género, el punto 2, el ‘Compromiso por las mujeres’ pedía aumentar los recursos para la ley integral de violencia basada en género y acelerar su plena implementación.

Asimismo remarcaba la necesidad de garantizar el acceso a la educación, la difusión pública y la capacitación profesionales para alertar y detectar la violencia en género.