Gilberto Vázquez declaró ante la Justicia por el secuestro de los hermanos Julien en 1976
El coronel retirado Gilberto Vázquez fue trasladado desde Rivera hacia Montevideo para declarar ante la jueza Ana de Salterain, por el secuestro y traslado a Chile de los niños Anatole y Victoria Julien, en el año 1976.
Este viernes 16 de octubre, el coronel retirado Gilberto Vázquez fue trasladado desde la ciudad de Rivera, donde reside, hacia Montevideo para declarar ante la Justicia por el secuestro y traslado a Chile en 1976 de los niños Anatole y Victoria Julien.
En febrero de 2019 el fiscal penal de Crímenes de Lesa Humanidad, Ricardo Perciballe, había solicitado el enjuiciamiento y prisión de los ex militares Gilberto Vázquez, José Nino Gavazzo, Ricardo Arab, Luis Maurente y Jorge Silveira, por el caso de los hermanos Julien.
El fiscal solicitó el enjuiciamiento y prisión de los ex militares por considerar que cometieron dos delitos de “privación de libertad, en concurrencia fuera de la reiteración, con dos delitos de supresión de estado civil y dos delitos de abandono de niños”.
No recuerda nada
El abogado defensor de los familiares, Pablo Chargoñia, expresó este viernes que se trató de una audiencia ratificatoria y que Gilberto Vázquez “no reconoció vínculos con el caso”, según informó Montevideo Portal.
Chargonia indicó que Gilberto Vázquez alegó “no recordar nada y estar confundido”, añadió que en 2010 reconoció haber operado en Argentina, aunque no reconoce vínculos con el caso de los hermanos Julien.
El abogado defensor manifestó que aún resta una última audiencia de ratificación porque hay cuatro pedidos de procesamiento por el caso, pero todavía no se definió una fecha.
El caso
En la madrugada del 26 de setiembre de 1976, tropas apoyadas por un tanque de guerra rodearon una vivienda de la calle Mitre. Dos policías femeninas se hicieron cargo de los niños Anatole y Victoria.
El padre de los menores murió en el procedimiento, pero su cuerpo nunca apareció. Mientras que la madre fue trasladada junto con sus hijos a Automotores Orletti, donde comandos uruguayos la torturaron, allí funcionó entre mayo y noviembre de 1976 un centro clandestino de detención, tortura y exterminio.
Anatole y Victoria fueron vistos por varios testigos en Orletti junto con otra niña secuestrada, Mariana Zaffaroni.
Los dos niños fueron trasladados a Montevideo a fines de octubre de 1976 y permanecieron en la sede del Servicio de Información de Defensa, de bulevar Artigas y Palmar.
A fines de noviembre de 1976 fueron embarcados en un avión de línea hacia Chile, donde fueron abandonados en Valparaiso.
Una vez que la situación de los hermanos tomó estado público, fueron internados en una Casa Cuna de Playa Ancha, donde permanecieron por un lapso de tres años.
En el año 1980 fueron adoptados por un matrimonio chileno que les brindó los apellidos.
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