Irán inicia ejecuciones de manifestantes por muerte de Mahsa Amani: hay más de 15.000 personas arrestadas

Irán ordenó este lunes su primera sentencia de muerte a un manifestante de las protestas que han representado un desafío para el gobierno teocrático de Ebrahim Raisi, que estallaron cuando la llamada “policía de la moral” asesinó a la joven Mahsa Amini por no usar correctamente el velo islámico.

Se ordenó que sea ejecutada una persona cuya identidad no ha trascendido, a quien se acusó de incendiar un edificio gubernamental. Su sentencia viene después de que fuera aprobada por 272 de los 290 legisladores del Parlamento iraní la reinstauración de la pena de muerte.

Se cree que Irán ejecuta a más personas anualmente que cualquier otro país excepto China, y la primera sentencia de muerte conocida dictada contra una figura identificada con el movimiento de protesta ha alarmado a movimientos de defensa de los derechos humanos.

Hasta ahora, al menos 326 personas han muerto en casi dos meses de manifestaciones, y ONGs aseguran que hay más de 15.000 personas detenidas que podrían también enfrentar la pena de muerte. Entre las víctimas mortales hay 43 menores de edad y 25 mujeres.

La chica de 22 años había sido detenida el 22 de setiembre de 2022 por la policía y fue torturada, violada y asesinada mientras estaba bajo arresto. La versión oficial de la muerte fue un supuesto ataque cardíaco, pero testigos han dicho a agencias de noticias y medios internacionales que vieron a los oficiales golpearla con una porra y pegarle en la cabeza contra un vehículo. La familia encontró moretones en las piernas que no tenía antes de ser arrestada, y tomografías computarizadas mostraron fracturas en el cráneo.