Mal perdedor

Bolsonaro no reconoció la derrota ni mencionó a Lula en su discurso, tras días de silencio

El mandatario había guardado silencio mientras en las calles cientos de bloqueos interrumpían la circulación en todo el país, llevados a cabo por fanáticos y seguidores suyos.

 

El presidente brasileño, Jair Messias Bolsonaro, habló por primera vez desde su derrota, la cual no reconoció explícitamente y no mencionó al presidente electo, Luiz Inácio Lula da Silva, en su escueta alocución de menos de cinco minutos.

A pesar de haber llegado con una sonrisa, se retiró con un semblante evidentemente crispado y no aceptó preguntas de la prensa.

A continuación, el discurso completo: 

Quiero empezar agradeciendo a los 58 millones de brasileños que me votaron el 30 de octubre.

Los actuales movimientos populares son el resultado de la indignación y el sentimiento de injusticia por la forma en que se llevó a cabo el proceso electoral.

Las manifestaciones pacíficas siempre serán bienvenidas. Pero nuestros métodos no pueden ser los de la izquierda que siempre han perjudicado a la población, como la invasión de propiedades, la destrucción del patrimonio y el recorte del derecho de ir y venir.

La derecha ha surgido realmente en nuestro país. Nuestra sólida representación en el Congreso demuestra la fuerza de nuestros valores: Dios, la patria, la familia y la libertad.

Hemos formado muchos líderes en todo Brasil. Nuestros sueños están más vivos que nunca. Estamos a favor del orden y del progreso.

Incluso enfrentándonos a todo el sistema, superamos una pandemia y las consecuencias de una guerra.

Siempre se me ha tachado de antidemocrático y, en contra de mis acusadores, siempre he jugado dentro de las cuatro líneas de la Constitución.

Nunca he hablado de controlar o censurar los medios de comunicación o las redes sociales.

Como Presidente de la República y ciudadano, seguiré cumpliendo todos los mandamientos de nuestra Constitución.

Es un honor ser el líder de millones de brasileños que, como yo, defienden la libertad económica, la libertad religiosa, la libertad de opinión, la honestidad y los colores verde y amarillo de nuestra bandera. Muchas gracias.

Ni bien se retiró Bolsonaro, el ministro de Presidencia, Ciro Nogueira, tomó el micrófono para referirse a Lula da Silva como “presidente electo”. Será él quien se encargue del proceso de transición hacia el nuevo gobierno que inicia el 1° de enero. 

El mandatario ultraderechista había guardado silencio desde el domingo, cuando fue declarado ganador Lula. Desde el lunes en la mañana, cientos de puntos en rutas y carreteras están siendo bloqueados por fanáticos suyos que aseguran hubo fraude e, incluso, algunos incluso llegando a pedir un golpe de Estado a las fuerzas armadas.

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