Ghislaine Maxwell, pareja de Jeffrey Epstein, declarada culpable de explotación sexual de menores

Ghislaine Maxwell, esposa del fallecido pederasta Jeffrey Epstein, fue encontrada culpable en cinco de seis cargos de explotación sexual de menores y mayores de edad, luego de comprobarse que fue partícipe necesaria de la red de pederastia que orquestó junto a Epstein.

Maxwell, de 60 años de edad, se declaró inocente de seis cargos federales: tráfico sexual de un menor, tentar a un menor para que viaje para participar en una actividad sexual delictiva, transportar a un menor con la intención de participar en una actividad sexual delictiva y tres cargos de conspiración. Sin embargo, la evidencia y la gran cantidad de testimonios pesaron mucho más para que ahora se enfrente a hasta 65 años de prisión.

Entre otras atrocidades, Maxwell reclutó y entregó a Epstein y otros pederastas a adolescentes que fueron abusadas sexualmente entre 1994 y 2004. El magnate fue encontrado muerto en su celda en una cárcel de Manhattan en 2019: supuestamente se habría suicidado pero un halo de misterio siempre ha estado sobre el deceso.

El jurado, que estaba compuesto por seis mujeres y seis hombres, deliberó durante aproximadamente 40 horas a lo largo de seis días.

La acusada no tuvo ninguna reacción cuando escuchaba el veredicto; solamente se bajó el tapabocas y se sirvió un vaso de agua. Aún no se ha fijado la fecha para la sentencia.

Maxwell y Epstein eran miembros de la alta sociedad estadounidense y británica, y se regodeaban con grandes figuras políticas y faranduleras como Donald Trump, el príncipe Andrew de York (de la casa real británica), Bill Gates, Woody Allen y otros.

Los testimonios fueron clave

Todos los cargos contra Maxwell se basan en los testimonios de cuatro mujeres que la denunciaron a ella como facilitadora de abusos sexuales. En algunos de los casos, Epstein fue uno de los violadores, pero en otras ocasiones fueron entregadas a otros hombres que abusaron de ellas.

La defensa intentó socavar los recuerdos y poner en duda a las acusantes durante los interrogatorios, y argumentaron que la Fiscalía intentaba convertir a Maxwell en un chivo expiatorio porque se habían quedado sin Epstein para juzgarlo.

Anna Farmer, una de las víctimas, ofreció en el juicio extensas y detalladas narrativas sobre lo sucedido, desde que fue reclutada por la mujer hasta que fue llevada a la mansión para ser abusada. “Espero que este veredicto traiga consuelo a todos los que lo necesitan y demuestre que nadie está por encima de la ley. Incluso aquellos con gran poder y privilegio tendrán que rendir cuentas cuando abusen sexualmente y exploten a los jóvenes”, dijo la mujer que era muy joven cuando fue víctima de la red de pederastia.

Los abogados de Virginia Giuffree Roberts, también víctima, dijeron que el veredicto marca “un gran día para la justicia y para los supervivientes de Maxwell” que “reivindica la valentía y el compromiso de nuestras clientas, que se mantuvieron en pie contra todo pronóstico durante muchos años para llevar a Jeffrey Epstein y Ghislaine Maxwell ante la justicia”.

La defensa de la acusada apelará la decisión. “Creemos firmemente en la inocencia de Ghislaine. Obviamente, estamos muy decepcionados con el veredicto. Ya hemos empezado a trabajar en la apelación. Y estamos seguros de que será reivindicada”, dijo Bobbi C. Sternheim, uno de sus abogados.