CRISIS POLÍTICA EN ISRAEL

Benjamin Netanyahu fracasa una vez más en conformar gobierno en Israel

En medio del un denso proceso legal en su contra con fuertes acusaciones de corrupción, Netanyahu volvió a fracasar en su intento por conformar gobierno. Su alianza con partidos de derecha y ultraderecha no fue suficiente para obtener los respaldos parlamentarios suficientes.

Benjamín Netanyahu junto a su esposa Sara. Foto: Twitter/Netanyahu
Benjamín Netanyahu junto a su esposa Sara. Foto: Twitter/Netanyahu

El primer ministro israelí, Benjamin Netanyahu, falló de nuevo en su intento por conformar gobierno al vencer el plazo previsto, lo que podría representar una oportunidad para sus adversarios que pretenden sacarlo del poder.

“Poco antes de la medianoche, Netanyahu informó a la residencia del presidente (Reuvén Rivlin) que no podía formar un Gobierno y, por lo tanto, devolvió el mandato al presidente”, informó el despacho presidencial en un comunicado de prensa.

Netanyahu está habilitado para solicitar un plazo de dos semanas adicionales pero no hizo uso de esa herramienta, por lo que Rivlin será un jugador clave en el proceso y podría otorgar el mandato a otro candidato como el centrista Yair Lapid del partido Yesh Atid (Hay Futuro), o traspasar la tarea al Parlamento israelí (Kneset).

Este miércoles, el presidente está conversando uno a uno con los 13 partidos con escaños en el Parlamento para discutir “la continuación del proceso de formación de un gobierno”, según informó un portavoz del jefe de Estado.

Netanyahu, que ganó los comicios el 23 de marzo, no tiene mayorías parlamentarias, y Leyes Fundamentales de Israel (equivalentes a la Constitución Política) le otorgan el poder durante 28 días para intentar conformar una coalición de gobierno. Tras casi un mes de intentos, no consiguió avances significativos para hacerse con los votos de confianza de 61 de los 120 parlamentarios, el mínimo necesario para gobernar.

El partido Likud (el oficialista del primer ministro) logró recibir el espaldarazo de los partidos Shas y Judaísmo Unido de la Torá, de corte ultraortodoxo, así como el del Partido Sionista Religioso, posicionado en la extrema derecha ultranacionalista, pero no pudo seducir a los de Yamina (ultraderecha) o el Raamn (islamistas).

Ahora la opción está abierta para el candidato centrista Yair Lapid, de Yesh Atid (Hay Futuro), que quedó segundo en los comicios de marzo.

En medio de todo esto, Netanyahu está atravesando un denso proceso penal en el cual se le acusa de varios cargos de corrupción.

El fiscal general israelí, Avichai Mandelblit, interpuso en junio de 2019 una acusación de 63 páginas contra Netanyahu, en donde lo señala por recibir dinero y lujosos regalos de amigos multimillonarios, equivalentes a cientos de miles de dólares, y a cambio habría otorgado favores políticos.

También se le acusa de intercambiar favores políticos con magnates de los medios de comunicación y telecomunicaciones a favor de coberturas favorables a su imagen.

 

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