Denuncian que Israel lleva adelante un “apartheid” contra el pueblo palestino

Una organización pro defensa de los derechos humanos con sede en Israel acusó al gobierno de ese país por estar llevando adelante un «apartheid» contra el pueblo palestino al instaurar un estado de «supremacía judía desde el río Jordán hasta el Mediterráneo».

La organización B’tselem, con más de 30 años de trayectoria, ha criticado en otras ocasiones al gobierno de Bejamin Netanyahu, pero ha elevado el tono después de documentar abusos contra palestinos en en Gaza y Cisjordania.

«No hay un solo centímetro cuadrado entre el río y el mar en el que un palestino y un judío sean iguales», declaró Hagai El-Ad, director ejecutivo de B’Tselem.

Esta insólita acusación llega al mismo tiempo que el primer ministro Netanyahu anunció la construcción de 850 nuevas viviendas para colonos judías en territorios considerados palestinos por el ordenamiento internacional. Las Naciones Unidas denunció que esto provocó el desalojo de 16 familias palestinas en la zona de Jerusalén Este. «Estos desalojos son extremadamente alarmantes y parecen ser parte de un patrón más amplio de forzar a las familias palestinas de Jerusalén a abandonar sus hogares para despejar el camino para más asentamientos israelís ilegales», señaló Michael Lynk, investigador de la organización.

«Un principio organizativo se encuentra en la base de una amplia gama de políticas israelís: avanzar y perpetuar la supremacía de un grupo, los judíos, sobre otro, los palestinos», espetó El-Ad desde una columna en ‘The Guardian’.

Territorios ocupados

Israel ha estado ocupando tierras en Cisjordania y Jerusalén Este desde 1967 que están consideradas propiedad del Estado Palestino por la comunidad internacional. En la franja de Gaza se retiró desde el 2005 ante la presión mundial pero mantiene un bloqueo asfixiante ya que la totalidad de la frontera de esa zona es con tierras israelíes.

B’Tselem asegura que hay flagrantes y repetidas violaciones a los derechos humanos por estas situaciones y que hay distintos niveles de vejación dependiendo de la zona de Palestina en la que se ha nacido: los oriundos de Gaza son los que más abajo en la cadena social están, aseveran.

Si bien los palestinos que viven en los territorios soberanos legales de Israel son los que gozan de más derechos, dice B’Tselem, una ley aprobada por el gobierno de Netanyahu los coloca en una posición de desventaja porque declaró al país como «estado-nación del pueblo judío» facilitando la criminalización contra los árabes y la ocupación de tierras.

Niegan la vacuna a palestinos

La organización Amnistía Internacional (AI) denunció por su parte que el gobierno de Netanyahu está negando la vacuna contra el COVID-19 a médicos y personal de salud de origen palestino, lo que calificó de discriminación.

AI asevera que el Ministerio de Salud israelí empezó a vacunar a su población el 23 de diciembre de 2020, levantando elogios en todo el orbe, pero que «el plan de vacunación contra la COVID-19 abarca sólo a los ciudadanos israelíes, incluidos los colonos que viven en Cisjordania, y los habitantes palestinos de Jerusalén».

«Excluye a los casi cinco millones de palestinos que viven en Cisjordania y la Franja de Gaza, bajo la ocupación militar israelí», añade la ONG.

«El programa de vacunación contra la COVID-19 de Israel pone de manifiesto la discriminación institucionalizada que define la política del gobierno israelí hacia la población palestina», añade AI en su comunicado.