Abuso policial en EE.UU.: Policía destruyó medicamentos y agua a manifestantes | Video

Durante las protestas en la ciudad de Asheville, Carolina del Norte, por la muerte de George Floyd, publicaciones en las redes sociales y medios locales muestran que las fuerzas del orden dañaron botellas de agua y medicamentos en lo que muchos consideraron un acto más de abuso policial.

La protesta marcó el tercer día de manifestaciones en Asheville en respuesta a la muerte del hombre afroamericano a manos de un grupo de policías que le causaron asfixia y daño cerebral antes de fallecer en un hospital.

El video del diario Citizen Times muestra a los oficiales de policía de Asheville con equipo antidisturbios y sosteniendo escudos formando un círculo protector alrededor de los agentes que pisotean y apuñalan botellas de agua. Otros oficiales destruyeron suministros médicos como vendajes y solución salina.

Sean Miller, un estudiante de Universidad de Carolina del Norte en Asheville, quien es jefe de comunicación del equipo a cargo del puesto médico, dijo que entre 10 y 12 médicos presentes estaban claramente marcados como tales y no provocaron a la policía de ninguna manera, y sin embargo, llegaron a destruir todo el equipamiento.

«Unos minutos después de las 8 en punto, vimos un equipo SWAT venir hacia nosotros», dijo Miller al medio. «Cuando ase acercaron, inmediatamente nos dijeron: ‘Somos el Departamento de Policía de Asheville, y ustedes deben irse'». Nos agarraron por los hombros y nos sacaron del callejón donde estábamos tratando de proporcionar asistencia médica».

Nadie ofreció resistencia

Miller explicó además que tenían un permiso especial otorgado por la administración de la ciudad para estar presentes en el lugar.

Algunos de los desalojados resultaron con moretes en sus brazos por la fuerza con que fueron agarrados, aunque ninguno resultó gravemente herido. Las pérdidas en insumos médicos superaron los US$700.

Glenna Grant, de 33 años, dijo que fue testigo de cómo los oficiales destruían botellas de agua y suministros médicos. Ella y otros establecieron el centro médico y no planeaban marchar protestando sino brindar atención al que lo necesitara. «Nos golpearon con sus escudos, tiraron al suelo a varias personas, nos arrojaron con fuerza, nos gritaron y nos trataron como criminales, a pesar de que nadie ofreció resistencia», añadió.

Jon Jones, también parte del equipo médico, dijo que la policía detuvo una operación pacífica y que «esas acciones son inexcusables».

Pedido de explicaciones

En una publicación de Facebook del miércoles, la alcaldesa de la ciudad, Esther Manheimer, reconoció el incidente que ocurrió a las 8:14 pm en un pequeño callejón cerca de una plaza en el centro de la localidad.

«Soy consciente del incidente que involucró a oficiales que destruyeron suministros médicos para manifestantes, incluidas botellas de agua, alimentos y otros suministros», escribió Manheimer. «El Consejo ha pedido una explicación de por qué ocurrió eso.

«Somos una ciudad que se preocupa y quiero agradecer a todos nuestros oficiales que se han arrodillado y han trabajado para protegernos. Pero este fue un momento decepcionante en una tarde pacífica», concluyó.