Vladimir Putin asumió su cuarto mandato

Vladímir Putin fue investido presidente por cuarta vez este lunes en una ceremonia celebrada en el Gran Palacio del Kremlin de Moscú.

En las elecciones del pasado 18 de marzo Putin obtuvo un 76,69% de los votos, y hoy fue acompañado por alrededor de 5.000 personas, entre ellas miembros del actual gabinete, las dos cámaras del Parlamento ruso, la Administración del presidente y la Corte Constitucional de Rusia.

Según el texto del juramento presidencial, establecido en la Constitución rusa, el líder se ha comprometido a «defender la soberanía y la independencia, la seguridad y la integridad del Estado y servir fielmente al pueblo» ruso.

«En estos momentos, al asumir el cargo de presidente de Rusia, soy muy consciente de mi enorme responsabilidad ante cada uno de ustedes, ante todo nuestro pueblo multinacional, ante Rusia, un país de grandiosas victorias y logros, ante la historia milenaria del Estado ruso y ante nuestros antepasados», expresó Putin en su discurso inaugural.

«Considero que es mi deber y el sentido de mi vida hacer todo para Rusia, para que tenga un presente y un futuro pacífico y próspero, (…) para el bienestar de todas las familias rusas», agregó tras agradecer al pueblo ruso por el apoyo sincero y la confianza que depositó en él en las elecciones presidenciales.

«Les aseguro que el objetivo de mi vida y de mi trabajo será servir a las personas y a nuestro país, tal y como lo ha sido antes. Para mí, eso es lo más importante», aseguró.

También hizo hincapié en la seguridad y defensa del país y recordó que «Rusia es un participante fuerte, activo e influyente de la vida internacional» y dijo que «la seguridad y la defensa del país están firmemente aseguradas. Continuaremos prestando constantemente la atención necesaria a estos asuntos».

A su vez dijo que Rusia aboga por «la cooperación equitativa y mutuamente beneficiosa con todos los Estados en aras de la paz y la estabilidad en nuestro planeta».

Finalmente comparó a su país con un ave fénix que renace de sus cenizas. «En sus más de mil años de historia, Rusia se ha enfrentado repetidamente a épocas de dificultades y retos, pero siempre renació como el ave Fénix y se elevó a alturas inaccesibles e inalcanzables para los demás; para nuestro país se convirtieron en un trampolín, en nuevos hitos históricos para un futuro gran avance».

Detenciones

Este sábado, en la previa de la nueva investidura de Putin, opositores realizaron una manifestación en la que fue detenido, entre otros, el político ruso Alexei Navalny, quien fue puesto en libertad horas después.

Tras ser liberado Navalny acusó a Putin autoritarismo y corrupción. El opositor es acusado de organizar un evento público sin permiso y de resistencia a la policía, según explicó él mismo. Un tribunal verá su caso el próximo 11 de mayo, informó un abogado de su fundación anticorrupción.

Navalny había convocado a sus seguidores a salir a las calles del país el sábado para protestar contra Putin bajo el lema: “No es un zar para nosotros”.

Según las denuncias del portal de derechos humanos OVD-Info la policía arrestó a 1600 personas en todo el país durante las manifestaciones, más 700 en Moscú. Por su parte la policía rusa sólo reconoce 300 arrestos en la capital y 200 en San Petersburgo.

Las manifestaciones contra la prolongada permanencia en el poder de Putin (18 años), así como contra la corrupción y la censura en Internet en Rusia se extendieron a unas 90 ciudades del país.