Surgen nuevos datos del caso Victoria Salazar, asesinada por policías en México

 

La inmigrante salvadoreña Victoria Salazar, murió a manos de un grupo de policías el pasado 28 de marzo a las afueras de un negocio de Tulum, populoso balneario de Quintana Roo, en el caribe mexicano.

Cuatro policías atendieron al llamado del dueño de una tienda en el barrio de Tumben Ka, quien aseguró que había una mujer alterando el orden público y agrediendo a los trabajadores y transeúntes.

Según informó la policía en su parte oficial, encontraron a una mujer agresiva que fue sometida con exceso de fuerza y, según testigos presenciales de los hechos -que registraron videos- provocaron que perdiera el conocimiento.

En material fílmico ahora en poder de las autoridades mexicana se puede ver que una oficial apretó durante varios minutos su rodilla contra el cuello de Salazar, en un episodio parecido al que provoco la muerte del afroamericano George Floyd en Mineápolis, Estados Unidos, el 25 de maro de 2020.

Nueva información

El medio investigativo salvadoreño El Faro accedió a nuevos videos en los cuales se constata lo que los vecinos de la mujer habían declarado a la policía: que ella solía tener episodios aislados de crisis de ansiedad.

Según se ve en los clips de video de las cámaras de seguridad, Victoria parece querer alejar algo con un bidón de agua vacío, antes de salir de cuadro de una de las cámaras pero aparece en otra.

La víctima salió del local aún alterada y fue cuando se encontró con los oficiales que le provocaron la muerte.

El activista de derechos humanos y fotógrafo profesional, Daniel Martínez Amador, grabó un video que se viralizó a nivel mundial, en el cual se ve cómo es sostenida contra el suelo entre los cuatro oficiales. En entrevista con el medio antes mencionado, Martínez explicó que fue esposada en la espalda y lanzada al suelo, en donde la aplastaron hasta morir.

En un informe de la Fiscalía General de Quintana Roo hecho público la semana pasada se determinó que los agentes provocaron «una fractura en la parte superior de la columna vertebral producida por la ruptura de la primera y segunda vértebra». y también que se constató el uso de «desproporcionado» de la fuerza por parte de los uniformados.

Aparentemente, los oficiales trataron de dejar el cuerpo ya sin vida en las oficinas de la Secretaría de Protección Civil local, pero no fueron recibidos. Sin más remedio, tuvieron que llevarla a la comandancia y dar parte a sus superiores.

 

Los agentes serán acusados de feminicidio y enfrentan una pena no menor a 40 años. Victoria tenía visa humanitaria (refugiada) y era madre de dos hijas, una de 15 y otra de 16 años, ambas vivían con ella en Tulum. Medios salvadoreños aseguran que habría migrado de su país huyendo de la violencia de género, temiendo por su vida.