La primer ministra de Finlandia propuso una jornada laboral de cuatro días

El gobierno de Finlandia propuso la posibilidad de reducir la semana laboral a cuatro días con tres de descanso, al tiempo que estudian reducir la jornada laboral diaria a seis horas máximo para un total de 24 horas semanales, un cambio importante en comparación al modelo actual y que busca que sus ciudadanos pasen más tiempo con sus seres queridos.

“Creo que la gente merece pasar más tiempo con sus familias, sus seres queridos, haciendo sus hobbies y otros aspectos de la vida, como la cultura”, aseveró la primera ministra, Sanna Marin, a la revista New Europe. Por ello, señaló que la reducción de las horas de trabajo puede ser “el siguiente paso en nuestra vida laboral”.

En la actualidad, en Finlandia la jornada laboral establecida por ley es de ocho horas por cinco días pero, bajo el nuevo modelo, cada fin de semana de descanso sería de tres días. Los empleadores y empleados podrán negociar si desean, por ejemplo, distribuir los días libres entre los laborables.

Políticas laborales de vanguardia

El gobierno de Sanna Marin ha obtenido particular atención a nivel internacional debido a que ella es la mandataria más joven del mundo: con solo 34 años trajo una frescura a la política europea y nacional que ya está siendo elogiada.

Ella es la líder de una coalición de cinco partidos, todos dirigidos por mujeres, y cuatro de ellas son menores de 35 años.

Frente al desarrollo de la robotización y la automatización de procesos, que avanza a un ritmo mucho más rápido que los incrementos salariales, numerosos gremios y sindicatos han estado reclamando la discusión sobre la reducción de la jornada laboral.

En ese sentido, existe respaldo científico que comprueba que la jornada de seis horas es más productiva que la de ocho horas, según un estudio publicado por la revista Harvard Business Review. En agosto de 2019, Microsoft Japón cerró las oficinas de viernes a domingo, y la productividad aumentó un 39.9% con respecto al mes anterior, el uso de electricidad se redujo 23.3% y la cantidad de papel impreso bajó un 58.7%. El 92% de los empleados se mostraron complacidos con una semana laboral de cuatro días.