Producción responsable para cuidar el medioambiente, reto actual por generaciones futuras
El Consejo de Comercio e Inversiones Caricom – Mercosur (CCICAME), anunció desde su Secretaria Ejecutiva en la persona de su CEO y Consejero Internacional - Lic. Nelson Simatovich, la satisfacción por estar avanzada su participación con el Estatus de Observador en la COP 26 ha desarrollarse este año 2021.
La Conferencia de las Naciones Unidas sobre el Cambio Climático (COP26), organizada por el Reino Unido en colaboración con Italia, tendrá lugar del 31 de octubre al 12 de noviembre de 2021 en el Scottish Event Campus (SEC) de Glasgow, Escocia, Reino Unido de Gran Bretaña e Irlanda del Norte.
El representante diplomático, informa que a la vista de los efectos de la COVID-19 en el mundo, la Mesa de la COP de la CMNUCC, con el Reino Unido y sus socios italianos, habían decidido reprogramar la conferencia prevista inicialmente para el pasado mes de noviembre de 2020.
La Presidencia de la COP 26 la tiene el Reino Unido y es organizada por la Convención Marco de las Naciones Unidas sobre el Cambio Climático (CMNUCC).
Simatovich explica que será una nueva instancia, para trabajar en la concientización de las grandes economías del mundo, responsables de la mayor parte de las emisiones y residuos contaminantes, ya sean estas gaseosas, liquidas y/o sólidas, que afectan severamente la atmosfera, las tierras y los océanos.
El enviado especial expresa que es una nueva oportunidad para que la comunidad internacional, pondere entre los informes de los científicos del Panel Intergubernamental de Expertos sobre el Cambio Climático (IPCC) o sus prioridades políticas de crecimiento económico presente, sin ponderar los perjuicios para las generaciones futuras que habitaran el planeta en las siguientes décadas.
Para Simatovich, es poco probable que existan grandes avances y compromisos en esta cumbre, ya que en el momento histórico actual, donde aún no se divisa una salida clara y total a la pandemia de covid-19 y sus impactos en la economía mundial. Las naciones están prácticamente obligadas a poner todas sus industrias a toda máquina, para recuperar el crecimiento económico y los niveles de empleabilidad previos a la crisis sanitaria global, ya que la emergencia social se siente en gran parte del mundo y genera mucha inestabilidad política.
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