Uruguay es el país con mayor cantidad de vacunos por habitante del mundo: 3,8 cabezas/habitante

El año pasado las exportaciones de carne fueron el principal rubro de ventas de nuestro país al exterior. En las últimas décadas la importancia de la producción pecuaria se ha ido poniendo sobre la mesa. Varios puntos buscan equilibrio en un escenario productivo nacional que se está moviendo desde sus cimientos.

Es importante por ello y dada la actualidad del tema compartir algunos datos importantes que muchas veces no son tenidos en cuenta a la hora de analizar la pecuaria nacional, datos que surgen de censos de la DIEA.

La superficie dedicada a ganadería ­en forma exclusiva­ bovina y ovina representa el 59,6% (9.875.000 hectáreas) de la superficie total del país (16.420.000 hectáreas). Este valor aumenta al 82,4%, cuando también se considera la superficie ganadera-lechera, agrícola-ganadera, arrocera-ganadera y lechera-ganadera.

La mayor parte de las explotaciones especializadas en ganadería de carne y lana (78.8%) corresponde a productores de tipo familiar que a su vez poseen superficies de explotación menores a 500 hectáreas, lo cual explica que este tipo de explotaciones, siendo la mayoría, ocupe sólo el 21,9% del área y posea el 24,5% del total de las cabezas equivalentes de vacunos.

Con relación al tamaño, del total de las explotaciones ganaderas puras (38.243 establecimientos) y de las agrícola-ganaderas (7.370 establecimientos), la gran mayoría está concentrada en predios menores a 200 hectáreas (67% y 79%, respectivamente), sin embargo, su magnitud en proporción de la superficie manejada sólo representa el 11% y 10%, respectivamente.

Desde el punto de vista social, considerando la orientación familiar de la producción (sobre el criterio de una relación mano de obra familiar/mano de obra asalariada mayor a 1), la mayor cantidad de establecimientos familiares (25.501 de 39.120) y medios (4.060 de 6.199) se encuentran dedicados a la ganadería de carne y lana, representando un 65,2% y 65,5% respectivamente. En las explotaciones familiares el 65% de su principal ingreso lo constituye la ganadería de carne y/o lana, resaltando así su importancia económica y social del rubro. Los siguen la horticultura (12%), lechería (11%), suinocultura (2%) y avicultura (2%). Estas explotaciones tienen una mayor concentración en los departamentos ubicados al sur del río Negro (Canelones, Lavalleja, Colonia y San José, representando en sumatoria el 41%).

 

Un lugar en el mundo

Desde 1998 hasta la fecha se observa un crecimiento sostenido del stock bovino, el cual alcanzó a 12 millones de cabezas.

Del total de productores dedicados a la ganadería, un 63% son criadores, un 22% realizan ciclo completo y un 15% son invernadores especializados.

Se incrementó la producción de terneros, desde valores cercanos a 2 millones a inicio de la década de los 90, a más de 2,5 millones en la actualidad.

Es importante destacar que mientras las existencias de las vacas de invernada se redujeron en los últimos años, el stock de vacas de cría se mantiene, permitiendo incrementar la producción de terneros, la cual se mantiene prácticamente intacta.

Uruguay es el país con mayor cantidad de vacunos por habitante del mundo: 3,8 cabezas/habitante. El 54% del stock está en poder del 11% de los productores, los que tienen un mínimo de 500 vientres. En el otro extremo existe un número importante de productores muy pequeños (38%) que tienen rodeos pequeños, que no llegan a los 100 vientres. *

Te recomendamos

Publicá tu comentario

Compartí tu opinión con toda la comunidad

chat_bubble
Si no puedes comentar, envianos un mensaje