Día de la Tierra 2022: debemos invertir en nuestro planeta urgentemente
A pesar del histórico acuerdo climático de París de 2015, los países han hecho poco o nada para reducir sus emisiones de gases contaminantes, y son pocos los que se encaminan hacia la descarbonización de sus economías para mantener la temperatura de la Tierra en 1,5°C por encima de los niveles preindustriales.
Una vez más se conmemora el Día de la Tierra, una efeméride que tiene como fin recordarle a la humanidad que todo debe cambiar radical y urgentemente para poder mantener la temperatura del planeta dentro del límite de los 1,5°C por encima de los niveles preindustriales.
Este porcentaje se acordó entre decenas de países de todo el orbe en 2015, en el histórico Acuerdo Climático de Paris, que muchos firmaron y aún no ratificaron todos, llegando incluso a salirse de este potencias como Estados Unidos en la era del negacionista del calentamiento global Donald Trump.
“Necesitamos construir una ciudadanía global fluida en el concepto de cambio climático e inspirada en la educación ambiental para actuar en defensa del planeta”, manifestó la presidenta de la ONG Earth Day, Kathleen Rogers.
El Día de la Tierra se celebró por primera vez en 1970, década en la que ya algunos científicos eran vistos con desprecio cuando hablaban de calentamiento global y cambio climático.
Antes de esa primera convocatoria, el mundo entero consumía gasolina con plomo, cuyo uso mundial se ha erradicado desde entonces.
A pesar de celebrarse casi exclusivamente en los EE. UU. durante casi 20 años, el Día de la Tierra ahora se ha convertido en un día reconocido internacionalmente y se celebra en más de 192 países. Cada año, mil millones de personas en todo el mundo se unen y movilizan por la misma causa: una mayor conciencia ambiental y acción climática urgente.
Estos son algunos datos para tener en cuenta durante la jornada y, ojalá, todos los días:
Una de las consignas de cada años es la extinción de especies que estamos propiciando las y los humanos con nuestras acciones: al día de hoy, más de 1.000.000 de especies están en peligro de desaparecer para siempre.
Según algunos expertos, estamos en medio de la sexta extinción masiva del planeta, que es causada casi en su totalidad por nosotros.
El desperdicio de alimentos genera más emisiones de gases de efecto invernadero que la industria de la aviación: mientras que la totalidad de los vuelos a nivel mundial genera entre el 3% y el 4% de los gases globales anuales, la comida que va al vertedero de basura sin consumir genera metano, un gas peor que el dióxido de carbono, y que totaliza del 6% al 8% de los gases globales anuales. Solo en los EE.UU., la producción de alimentos perdidos o desperdiciados genera el equivalente a 32,6 millones de automóviles en emisiones.
En Estados Unidos, el 35% de todos los alimentos producidos pasan del mercado al basurero, muchas veces sin haber sido sacados de sus envoltorios. A nivel global, ese porcentaje se ubica en el 17%, viniendo el 43% de hogares, el 26% de los servicios de alimentos como bares y restaurantes y el 13% del comercio minorista.
El hielo del Ártico se está derritiendo a velocidades que dejan a los científicos atónitos, en un hecho que tendrá grandes consecuencias en océanos y costas de todo el mundo. Hemos perdido aproximadamente 28 billones de toneladas de hielo desde mediados de la década de los noventas, con una tasa de derretimiento actual de 1,2 billones de toneladas por año.
Para tener un punto de comparación, el peso total de todos los objetos fabricados por el hombre es de 1,1 billones de toneladas.
Actualmente, hay mucho más CO2 en la atmósfera que en cualquier otro momento de la humanidad. Los sensores del observatorio Mauna Loa en Hawái, que ha estado rastreando las concentraciones de CO2 en la atmósfera desde finales de la década de 1950, detectaron valores de CO2 de más de 417 partes por millón en febrero y marzo de 2021.
Si se compara con el periodo entre 1750 y 1800, los niveles preindustriales, en ese momento el nivel era de 278 ppm, lo que infiere que la humanidad está a punto de duplicar esa cantidad.
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