Eclecticismo. No todo en la vida es ciencia, también hay música y poesía

Henry Engler presentará sus canciones en la Sala Zitarrosa

Quizás muchos conozcan a Henry Engler por aparecer en las páginas de los diarios. En los setenta como militante y preso político y a partir de 2000 como destacado científico.

Nacido en 1946 en Paysandú, estudió medicina hasta sexto año. Fue detenido en 1972 y pasó a ser uno de los nueve rehenes tupamaros que fueron mantenidos por los gendarmes de la dictadura cívica militar en condiciones infrahumanas de encierro hasta su liberación en 1985.

En 1986 viajó a Suecia, estudió medicina nuevamente y se recibió como médico. Luego se especializó en medicina nuclear en la técnica llamada tomografía de emisión de positrones.

En 2002, mostró por primera vez imágenes del cerebro de personas vivas que revelan la presencia de la sustancia que produce la enfermedad de Alzheimer.

En Uruguay dirige actualmente el Centro Uruguayo de Imagenología Molecular (Cudim), siendo médico consultante en el Hospital Universitario de Uppsala, Suecia.

Pero quizás pocos conozcan su faceta musical. En 1968 integró el trío Los Cimarrones, se incorporó al Centro de la Canción Protesta y participó en los espectáculos «Uruguay canta». En ese mismo año intervino en el Festival Latinoamericano de la Canción Universitaria, realizado en Santiago de Chile.

Al salir de prisión formó el grupo Cantares del Calabozo. En Suecia trabajó con los destacados músicos suecos Mikael Wiehe y Björn Afzelius, traduciendo muchas de sus canciones al español y grabándolas junto a Ricardo Collazo.

En 1985 Henry Engler realizó una grabación para el sello uruguayo Ayuí-Tacuabé con canciones de su autoría, muchas de ellas compuestas en prisión. En el librillo que acompaña esa edición Daniel Viglietti escribía: «Este primer fonograma de Henry como solista, testimonia una creatividad asombrosamente intacta, la que a su vez nos narra la descubierta o desarrollada en otros seres en similares condiciones. Abrazar estos cantos, reunidos con talento y sensibilidad por Engler, es lo que la lucha por la ternura nos reclama».

Pero la música de Henry Engler mostró a un compositor e intérprete singular, de gran poder comunicativo que, en la línea de su coterráneo Aníbal Sampayo, logra ser tradicional aportando una visión diferente en las músicas y textos tratados. Muchas de sus canciones tienen sabor a clásicos por su perfecta construcción, sencillez y profundidad emotiva.

En 2008 se estrenó en Uruguay la película «El Círculo», sobre «las vidas» de Henry Engler. Ahora, el sello Ayuí presenta en formato digital el disco «Cantos rodados», que también forma parte de esas otras «vidas» de Henry Engler. El encuentro en Sala Zitarrosa propiciará, además, una reunión informal con Daniel Viglietti y otros destacados invitados. Lo recaudado se destinará al fondo de investigación del Cudim.

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