Una técnica para controlar los sueños ha sido verificada por primera vez

Sueño lúcido es el término que se le da al estado donde el soñador es consciente de que está soñando, y tiene cierto control sobre cómo progresa el sueño. Alguna vez fue considerado un mito, pero en años recientes se ha confirmado que existen estos sueños y se encontró que algunos métodos funcionan para aumentar las perspectivas de que las personas puedan dominarlos.

Una técnica para inducir sueños lúcidos se ha verificado de forma independiente por primera vez, y podría ser incluso más efectiva cuando se combina con otras. Más de la mitad de los participantes soñaron lúcidamente durante el ensayo, una tasa de éxitos récord, necesidad de intervención externa.

Aunque aún se requieren aparatos especializados y entornos de laboratorio controlados, podría ser una herramienta potencial para curar traumas y controlar conductas poco deseables.

Duerme soñando

El doctor Denholm Aspy y sus colegas de la Universidad de Adelaida, Australia, instruyeron a 169 participantes en técnicas desarrolladas para inducir sueños lúcidos. Una de ellas, la prueba de la realidad, hace que las personas adquieran el hábito de verificar regularmente para asegurarse de que realmente están despiertas. La inducción mnemónica de los sueños lúcidos (MILD) hace que los participantes programen alarmas para despertarlos después de cinco horas y reciten «La próxima vez que esté soñando, recordaré que estoy soñando» antes de volver a dormir. Los practicantes de MILD también se imaginan cómo sería estar en un sueño lúcido.

Las pruebas de realidad por sí mismas no produjeron ningún beneficio, pero entre los que probaron las pruebas de realidad combinadas con las MILD, el 53% tuvo un sueño lúcido durante el periodo de prueba, con un 17% de éxito cada noche. Esto supera cualquier estudio hecho en el área anteriormente.

Aproximadamente el 55% de las personas tienen un sueño lúcido en algún momento de su vida, pero para la mayoría de las personas esto es algo muy raro. Aspy mismo se interesó en los sueños lúcidos después de tener uno cuando era niño, y cambió su doctorado en psicología al estudiar comunicación no verbal después de haber tenido un sueño lúcido la noche antes de comenzar su doctorado.