EE.UU. prohíbe exportar a China los chips necesarios para actualizar la computadora más potente del mundo

El departamento que regula las exportaciones de EE.UU. dijo que la Tianhe-2, al igual que otras supercomputadoras en China, están siendo empleadas para “diseñar, desarrollar o fabricar” armas atómicas, lo que contraviene expresamente las normas de venta de materiales estratégicos a otros países. En un comunicado de la agencia oficial se agrega que los desarrolladores chinos están actuando “contrariamente a la seguridad nacional o a los intereses de política exterior de Estados Unidos”.

La publicación “Top 500” que evalúa supercomputadoras en el mundo, ha catalogado a la Tianhe-2 como la computadora más potente en el planeta en los últimos 18 meses, según confirma la cadena BBC Mundo.

Mil billones de operaciones en un solo segundo

China necesita decenas de miles de chips para potenciar la máquina, algo que Intel fabrica, y que ahora está bloqueado. La Tianhe-2,desarrollada por la Universidad Nacional de Tecnología de Defensa de China, cuenta con 80.000 chips Intel Xeon, que le dan una capacidad de más de 33 “petaflops”. Cada “petaflop” es capaz de realizar unas mil billones de operaciones por segundo. Sin embargo los chinos consideran esto insuficiente para sus necesidades y aspiran que la máquina pase de los 33 a los 110 “petaflops”, para lo cual tienen un plan de actualizaciones, ahora detenido por la decisión estadounidense.

La empresa Intel se ha abstenido de hacer comentarios sobre la prohibición. “Intel cumplió con la notificación y solicitó la licencia, la cual fue denegada. Cumplimos la ley estadounidense”, dijo la compañía en un comunicado emitido por la televisión.

Sin embargo las mismas fuentes de la BBC, aseguran que la compañía firmó un acuerdo con el Laboratorio Nacional de Argonne, en Illinois, EE.UU., para construir al supercomputadora Aurora, que los norteamericanos apuestan será mayor aún que las chinas, en principio en el orden de los 180 “petaflops”. Intel ya recibió los primeros 200 millones de dólares para comenzar los trabajos de Aurora, agregaron las fuentes. Cabe consignar que esa suma es el precio total estimado, con que China realizó su supercomputadora, aunque otras estimaciones llevan la cifra al equivalente a 300 millones de dólares.