SENTENCIAS

Google obligada a aceptar primeras sentencias del “derecho al olvido” en España

Los recursos interpuestos por la defensa de Google contra el llamado “derecho al olvido”, han sido rechazados en 14 de los 18 primeros casos que se llevan adelante en España.

La primera de las sentencias conocidas es la de un ciudadano de nombre Mario Costeja

La Audiencia Nacional ha exigido a la compañía californiana, cancelar los datos de los 14 casos sentenciados, en tanto los usuarios se encuentran amparados por las nuevas normas que garantizan no podrán ser divulgadas por motores de búsqueda, informaciones adversas caducadas, “ya sea por la naturaleza de la información, su carácter sensible para la vida privada del afectado, por la no necesidad de los datos en relación con los fines para los que se recogieron o por el tiempo transcurrido, entre otras razones”.

Sin embargo en cuatro de las sentencias publicadas, la Sala de lo Contencioso de la Justicia española, dio su fallo a favor de Google, frente a las demandas de los particulares.

La primera sentencia fue por un embargo por deudas

La primera de las sentencias conocidas es la de un ciudadano de nombre Mario Costeja, que reclama por unos avisos aparecidos en la web de diario español La Vanguardia, donde constan embargos por deudas a la Seguridad Social. Las ejecuciones fueron hace 16 años atrás.
Siguiendo el criterio del Tribunal de Justicia de la Unión Europea, el juez español laudó que no tiene “relevancia en la vida pública” el mantenimiento del aviso con sus datos, en tanto no había prevalencia del interés público general, frente a sus derechos.

Los magistrados reconocieron que el tratamiento de la información era originalmente legal y sin objeciones, y que había “datos exactos por parte de Google pero que dado el tiempo transcurrido no son necesarios en relación con los fines para los que se recogieron o trataron”.

Añade la sentencia que la libertad de información está garantizada ya que la información se mantiene en el sitio web donde se publicó originalmente, y que podrían alcanzarse los datos, incluso al eliminarse los vínculos de páginas web por los que el damnificado reclamó.

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