Primer satélite de Ecuador choca al entrar en órbita y no logran que funcione

El “Pegaso” que sufrió un  choque lateral, con un objeto que integra la chatarra espacial en órbita y que se identificó como restos de cohetería rusa, no ha vuelto a emitir señales pese a los ingentes esfuerzos de los técnicos para que opere, cuando menos, en forma básica.

El satélite que seguirá orbitando hasta 2023, pasará ahora a estado de hibernación, es decir que permanecerá “apagado mientras siga su rotación incontrolada”, dijo la Agencia ecuatoriana en un comunicado. “Actualmente no existe posibilidad de captar ninguna señal del satélite”, agregó.

Ecuador estudia enviar un segundo satélite al espacio este año

Sin embargo los planes espaciales de Ecuador continúan al máximo ritmo, en tanto consideran que un accidente no debe ser lo que de por finalizados sus proyectos. Así planea enviar este año un segundo satélite al espacio, llamado Krysaor, desde una estación rusa. El aparato tendrá las mismas características que el Pegaso que había sido puesto en órbita el 25 de abril con la intención de transmitir imágenes de vídeo con audio en tiempo real, con fines exclusivamente educativos.

El satélite había sido lanzado al espacio en un cohete no tripulado desde la estación china de Jiuquan, en medio de un gran despliegue mediático en Ecuador, que incluyó una transmisión en vivo dispuesta por el gobierno.

Pegaso, un cubo de 10 por 10 centímetros con paneles solares -que al desplegarse alcanzan los 75 centímetros- y un peso de 1,2 kilos, transmitió imágenes hasta el 23 de mayo, cuando colisionó con los restos del cohete ruso.

El satélite fue construido y armado en Ecuador a un costo de 80.000 dólares que fueron aportados por el sector privado, mientras que el gobierno destinó 700.000 dólares para el lanzamiento, seguros, logística y pruebas de certificación del aparato, realizadas en Holanda.