Volvo presenta nuevo automóvil “a prueba de muertes” que es “imposible de chocar”
Definido por sus diseñadores como “imposible de chocar”, el nuevo “Volvo V40” garantiza a sus conductores, a través de un sofisticado sistema de computación a bordo, la imposibilidad de llevarse a nadie por delante, chocar con otros o volcar.
La empresa sueca busca adelantarse a sus competidores en la construcción del “auto-robot” el cual, según los fabricantes, está planteando más problemas legales que tecnológicos.
Es que para autorizar los nuevos automóviles, los empresarios están enfrentando nada menos que a la vigente Convención de tráfico de Viena, que regula las normativa de tránsito europea y establece como una de sus bases que “todos los vehículos deben ser conducidos por personas físicas”.
En este caso el auto “a prueba de choques”, tiene tal dependencia de la computadora a bordo que resulta difícil establecer que sea realmente el chofer quién conduzca. Además, en caso de un accidente, ¿quién será responsable? ¿el conductor, o el fabricante que afirma que es imposible chocar con ese auto?
Una nueva trama para resolver, mientras el nuevo modelo asombra a los amantes de los autos y causa la envidia de Ford, Mercedes Benz, BMW y Vauxhall, que ahora parecen haber quedado relegados en el afàn de un automóvil así.
“Es tan simple como el caballo del granjero”
Aunque el conductor convencional podría ver el nuevo modelo como algo demasiado complejo, Marcus Rothoff, directivo de Volvo, dijo al diario Daily Mail, que “el auto del futuro es tan simple como el caballo del granjero: éste puede chocar su carro, pero si se duerme, el caballo nunca chocará solo contra un árbol ni se caerá a un precipicio”.
Catalogado como el modelo “con las mayores medidas de seguridad jamás conocidas”, el Volvo V-40, tiene: detector de peatones, que alerta de la presencia y no los toca; airbag externo, que protege peatones en caso de colisión; detector de animales, que frena el vehículo al detectarlos; asistente de alto tráfico, que mantiene la distancia con los otros vehículos a baja velocidad; piloto automático, que genera un convoy de autos que circulan a la misma velocidad; detector de velocidad máxima, capaz de leer los carteles y evitar pasarse del límite de velocidad; alertas de punto ciego, que advierten sobre presencias en esas áreas; cámara delantera, para ver tránsito o peatones que llegan en esquinas ciegas; estacionamiento automático, que permite estacionar en espacio reducido sin tocar a los demás.
Los fabricantes anuncian su puesta en venta para 2020.
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