Albahaca: aroma, sabor y propiedades medicinales

La albahaca es una planta aromática muy popular en nuestra cocina que se compone de pequeñas hojas verdes, jugosas, con un intenso sabor y aroma inconfunibles.

Es originaria de Asia, y desde la antigüedad ha sido utilizada para fines culinarios, pero también medicinales.

Es una especia que es muy fácil de adquirir en cualquier supermercado o verdulería, que también se puede cultivar facilmente en jardínes o macetas para tenerla directamente ne el hogar.

La albahaca se puede consumir en la cocina de muchas maneras ya que su sabor aporta un toque especial a las diversas preparaciones. También se puede preparar una infusión poniendo sus hojas a remojar en agua hirviendo para aporvechar todas sus propiedades.

¿Cuáles son los beneficios la albahaca para la salud?

Protege el sistema digestivo: su consumo ayuda a aliviar dolores de estómago, indigestiones y gases intestinales gracias a sus componentes que inhiben los efectos de las enzimas que dañan el sistema digestivo.

Buena para el corazón: contiene minerales que nutren y protegen la salud cardiovascular, reducen el colesterol malo en la sangre y mejoran la circulación.

Refuerza el sistema inmunológico: sus hojas y aceite contienen propiedades antibacterianas y antibióticas que refuerzan el sistema inmune y colaboran para combatir y prevenir infecciones en el organismo.

Es anti cancerígena: por sus propiedades antioxidantes y contenido de flavonoides y betacarotenos, controla los radicales libres que dañan las células combatiendo la aparición de algunos tipos de cáncer ya que protege al cuerpo de la oxidación.

Combate el estrés: mascar sus hojas es utilizado para reducir la presencia de estrés y relajar el sistema nervioso. Además es considerada un remedio contra los dolores de cabeza.

Protege a los riñones: principalmente consumiéndola en forma de infusión es ideal para apoyar el funcionamiento renal, ya que posee un efecto diurético que ayuda a combatir la acumulación de líquidos y toxinas de sus tejidos. A su vez sus propiedades antioxidantes crean un barrera protectora frente al daño oxidativo y las toxinas, lo que disminuye el riesgo de padecer cálculos y enfermedades crónicas.