RICO Y SANO

¿Por qué es bueno incluir garbanzos en la dieta?

Los garbanzos son ricos en proteínas, fibra, vitaminas y minerales.

¿Por qué es bueno incluir garbanzos en la dieta?.Foto: Pixabay
¿Por qué es bueno incluir garbanzos en la dieta?.Foto: Pixabay

Los garbanzos pertenecen al grupo de las legumbres secas y son una gran opción para incorporar en la dieta durante todo el año.

Son muy versátiles y se pueden cocinar de variadas formas tanto en guisos y comidas calientes como en ensaladas frías. También son utilizados en preparaciones dulces. En cualquier tienda nutrista o supermercado los podemos conseguir en forma de granos enteros (crudos o cocidos) o como harina ya procesada para elaborar comidas.

En cuanto a sus nutrientes los garbanzos son ricos en proteínas de origen vegetal, por lo que son ideales para las personas que son vegetarianas y no consumen proteína de origen animal, y también son una gran fuente de fibra.

Una porción de 100 gramos de garbanzos cocidos sin sal nos aporta hidratos de carbono (creadores de energía), fibra dietética, proteínas, grasas saludables, vitaminas A, B6, C, E y K y minerales como calcio, fósforo, potasio, zinc, magnesio, hierro y sodio.

¿Para qué son buenos sus nutrientes?

Prevenir enfermedades cardiovasculares: su fibra dietética sirve para reducir el colesterol malo, la presión arterial y la cantidad de triglicérido, por lo que previene la aparición de ataques al corazón y enfermedades cardio y cerebrovasculares.

Problemas digestivos: aumenta el tamaño de las heces, y es recomendado para cuando se padece diarrea ya que estabiliza y fortalece el intestino. También es bueno para prevenir y tratar las hemorroides, y a diferencia de otras legumbres son de fácil digestión. Su contenido de fibra también es bueno para quienes padecen estreñimiento.

Contra la anemia: aumenta los niveles de hierro, que es una de las principales faltas de quienes padecen anemia. Son buenos para quienes practican mucho deporte.

Contra la diabetes: su contenido de zinc permite al cuerpo asimilar y almacenar insulina. Además contiene hidratos de carbono complejos, que son los de absorción lenta y ayudan a regular los niveles de azúcar en la sangre.

Mejorar la coagulación de la sangre: su contenido de vitamina K sirve para mejorar la coagulación de la sangre y el metabolismo de los huesos.

Combatir la depresión: contiene triptofán, un aminoácido que consumido en cantidad produce serotonina, conocida como la hormona de la felicidad.

Para embarazadas: su consumo es recomendado para embarazadas y quienes amamantan ya que contiene ácido fólico necesario para estos períodos.

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