La luz verde podría servir para combatir la migraña

El dolor de cabeza es un mal que acompaña a muchas personas en su día a día. La Organización Mundial de la Salud estima que al menos la mitad de la población mundial ha padecido dolor de cabeza al menos una vez en el último año.
Cuando el dolor de cabeza se produce de forma frecuente y está asociado a algún trastrono, la OMS considera que se trata de una dolencia discapacitante que perjudica la calidad de vida de las personas. Para el Global Burden of Disease Study realizado en 2013 las migrañas figuraban como la sexta causa global de discapacidad en el mundo, sin embargo muchas veces suele ser un asuntos subestimado, mal tratado y mal diagnosticado.

Muchos son los científicos que trabajan entonces en busca de una cura para este problema que ataca a millones de personas en el mundo. En este caso Rami Burstein, de la Harvard Medical School decidio indagar sobre el efecto de la luz en los dolores de cabeza, a través de un estudio con 69 voluntarios. Para su sorpresa descubrió que las personas expuestas a un tipo de luz muy determina, una luz verde clara, tendían a tener migrañas menos dolorosas que el resto, es decir que la luz verde era capaz de disminuir la sensación de dolor en algunos casos. Además encontraron que a bajas intensidades les aliviaba significativamente el dolor de cabeza, algo no los autores del estudio no esperaban encontrar.

Luego comprobaron que las señales eléctricas generadas en la retina y la corteza cerebral por las luces rojas y azules eran sensiblemente más intensas que las que desencadenaban las verdes.

Burnstein y su equipo realizaron después experimentos con animales para ver cómo reaccionaban sus neuronas del tálamo (el área cerebral encargada de transmitir la información del ojo a la corteza) a los distintos colores. Y encontraron que efectivamente, la luz verde claro las excitaba mucho menos que la azul.

Generar bombitas de luz verde

Ahora los investigadores trabajan para poder generar a través de la publicación de estos resultados la fabricación de bombitas de luz verde para que las personas puedan tener en sus casas y verse favorecidos, o unos lentes que la emitan. El tipo de luz verde utilizada para el trabajo tiene un precio abusivamente caro para el uso cotiano, y los autores aseguran que no basta con cubrir una bombita común con papel celofán verde u otro filtro ya que lograríamos un espectro de luz de 100 nanómetros, en comparación con los 530 que se necesitan para combatir la migraña.