19 DE MAYO

OMS: Día Mundial de Lucha contra la Hepatitis B y C, busca concientizar de afección cuyo virus porta 1 cada 12 personas

La Organización Mundial de la Salud convoca cada 19 de Mayo a recordar el Día Mundial contra la Hepatitis, tipo B y C, a fin de tomar conciencia de una patología que por lo general puede no presentar síntomas, pero cuyo virus se encuentra presente en 1 cada 12 individuos a nivel mundial.

Imagen representativa de un hígado saludable. Foto: Wikimedia Commons.
Imagen representativa de un hígado saludable. Foto: Wikimedia Commons.

Las hepatitis virales, son un grupo de enfermedades infecciosas que comprende las hepatitis A, B, C, D y E, afectando a cientos de millones de personas del mundo entero, pues provocan hepatopatías agudas y crónicas y causan la muerte de cerca de 1,5 millones de personas al año.

En 2014, los delegados de 194 gobiernos, durante la Asamblea Mundial de la Salud, asumieron el compromiso colectivo de promover la acción mundial para prevenir, diagnosticar y tratar la hepatitis viral.

Diagnóstico temprano como forma eficiente de contralor

La Alianza Mundial contra la Hepatitis (WHA, por sus siglas en inglés), ha convocado a los gobiernos del mundo para que se adopten medidas y acciones más concretas para la detección y tratamiento de enfermedades virales crónicas de esta clase, en tanto se consideran “alarmantes” las cifras actuales: entre 500 y 600 millones de personas en el mundo están infectados con hepatitis viral crónica. De ese número la gran mayoría desconoce su condición.

La hepatitis C en particular, casi siempre asintomática, suele ser diagnosticada de manera fortuita en controles médicos colectivos, donaciones de sangre o análisis sanguíneos en la búsqueda de otras afecciones.

La WHA apunta a la realización de más campañas de difusión sobre el tema, a la formación de médicos de atención primaria con conocimiento específico de la enfermedad, en tanto por la fecha relativamente reciente del descubrimiento del virus C (año 1989) y por la propia complejidad de la función hepática, no todos los profesionales de la medicina están capacitados para el adecuado tratamiento de la enfermedad.

Asimismo focaliza como prioritario el seguimiento integral multidisciplinario de los afectados, particularmente el área sicológica en tanto los estados depresivos profundos suelen afectar a muchos de los pacientes crónicos.

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