BEBIDAS

Universidad de Texas culmina estudio de ventajas entre vino ó cerveza con inéditas conclusiones

Un estudio del Centro Médico de la Universidad de Texas Southwestern, intentó dilucidar ventajas y desventajas del vino comparado con la cerveza, en el organismo para establecer criterios sobre efectos tanto sociales como sanitarios de la tradicional ingesta.

Según las conclusiones, el vino en principio “se sube más rápido a la cabeza” que la cerveza: en promedio los efectos del vino se desataron en el torrente sanguíneo alrededor de 50 minutos después de la ingesta, mientras que en la cerveza ocurrieron recién pasada la hora. Fotos: Pixabay.
Según las conclusiones, el vino en principio “se sube más rápido a la cabeza” que la cerveza: en promedio los efectos del vino se desataron en el torrente sanguíneo alrededor de 50 minutos después de la ingesta, mientras que en la cerveza ocurrieron recién pasada la hora. Fotos: Pixabay.

Teniendo en cuenta criterios básicos como estado de salud general, relación entre peso y consumo de ambas bebidas y consecuencias en lo inmediato y a corto plazo, los estudiosos siguieron el rastro diario a los testigos, que debían beber al mismo ritmo diariamente durante unos veinte minutos.

Según las conclusiones, el vino en principio “se sube más rápido a la cabeza” que la cerveza: en promedio los efectos del vino se desataron en el torrente sanguíneo alrededor de 50 minutos después de la ingesta, mientras que en la cerveza ocurrieron recién pasada la hora.

Del peso, la resaca y otros desaguisados

Según el informe, parte del cual publica BBC Future, el recurrente tema del peso y la bebida, carece de fundamentos para diferenciar al menos entre estas dos bebidas. En seguimientos de hasta diez semanas, los investigadores no lograron establecer diferencias de peso significativas entre quienes optaban por el vino y quienes lo hacían por la cerveza.

Otro tanto ocurrió con la resaca: ninguna de las dos bebidas parece ser la causante de “la peor” mañana siguiente, sino que en general depende del hábito de consumo de la persona, y un cambio radical de una a otra imprevistamente, sí es causa de dolores de cabeza, pero en términos genéricos de malestar orgánico,

El vino tinto aparece no obstante como “más saludable”, en tanto tiene mayor número de polifenoles, que inciden en la salud cardiovascular, algo que la cerveza dispone en proporción menor, al nivel del vino blanco, sensiblemente inferior en esta cuestión que su par de color profundo.

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