SALUD

Cigarrillos electrónicos acusados de incluir sustancias cancerígenas “variables”

El Instituto Nacional de Salud Pública de Japón, reportó al ministerio nipón un detallado informe sobre los peligros de los cigarrillos electrónicos, ante la expansión que éstos tienen como sustituto de los convencionales en el archipiélago japonés.

«En una de las marcas analizadas, el equipo investigador encontró un nivel de formaldehído que llegó hasta diez veces más que el contenido en un cigarrillo tradicional”

En sus conclusiones primarias el estudio muestra que los cigarrillos electrónicos, presentan sustancias cancerígenas, aunque en cantidades “sumamente variables”, dependiendo de marcas e incluso de partidas, aunque algunos podrían alcanzar incluso los estándares de los cigarrillos de tabaco convencionales.

El documento, que no implica una conclusión definitiva según los técnicos, reconoció que elementos como los formaldehidos, acroleínas, y metilglioxales, aparecieron en las muestras todos ellos involucrados en oncogénesis.

Las tasas varían considerablemente de una marca a otra e incluso para una misma marca, de una muestra a otra. En una de las marcas analizadas, el equipo investigador encontró un nivel de formaldehído que llegó hasta diez veces más que el contenido en un cigarrillo tradicional”, explicó el director de trabajo, el científico Naoki Kunugita, en declaraciones a la agencia AFP.

Mientras tanto el consumo de cigarrillos de tabaco alcanza mínimo histórico

La advertencia japonesa, se suma a la declaración de la Organización Mundial de la Salud, que ha pedido prohibir la venta de cigarrillos electrónicos a menores de edad, en tanto es “una seria amenaza” para jóvenes y bebes. La OMS extendió un pedido a los gobiernos para que limite esa venta además de prohibir usar el implemento en espacios públicos cerrados.

El sustituto enfrenta así serios problemas en momentos que el consumo de cigarrillos de tabaco acaba de batir sus récords históricos a la baja en Estados Unidos.

Según los Centros para el Control y Prevención de Enfermedades, mientras en 1965, el 42,4% de la población fumaba, para 2005 lo hacía el 20.9% y para 2013 solo el 17,8% de los adultos estadounidenses reconoció fumar.

El porcentaje sin embargo no alcanza para cumplir las metas federales previstas de reducir la cantidad de fumadores a un 12% antes de 2020. La principal medida impuesta para estimular el abandono de vicio, ha sido el aumento del precio de los cigarrillos.

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