El sexo permite a los microbios aumentar su potencia y ser más peligrosos

Que los microbios practique el sexo no es una novedad, que lo hagan en forma selectiva es totalmente novedoso. Los especialistas de la Universidad de Bristol marcaron con seguidores fluorescentes a los tripanosomas que habitan dentro de la mosca tse-tse, y que son responsables de la enfermedad del sueño, en los humanos.

Los microbios, realizan toda una serie de giros y piruetas antes de unirse para formar una nueva célula hibrida y los especialistas procuraban desentrañar las razones de tanto desgaste energético.

Ahora saben que los tripanosomas cumplen dentro de la mosca un verdadero ritual sexual para encontrar combinaciones de genes que se posicionen mejor a la hora de dañar otros organismos en una sola cepa.

Los microbios se cree que no eligen directamente, sino que cumplen su meta sexual cada vez que se encuentran dentro de la mosca.

Un intercambio genético que supera la simple división celular

Hasta ahora se creía que los tripanosomas, como buena parte de sus familiares protozoarios, se reproducían simplemente dividiendo en dos la célula que los constituye. Toda esta serie de microbios es de alta importancia para la medicina en general, ya que muchos de ellos son portadores de enfermedades que afectan a los humanos, así como a los animales domésticos y de cría.

El empleo del sexo como forma de intercambio de genes, se entiende puede servir para avanzar en comprender como hacen los microbios para resistir cada vez mejor a los antibióticos, uno de los mayores problemas de la medicina actual. Los microbios son capaces de mejorar su “arsenal” contra los antibióticos, pero la forma en que lo hacen siendo apenas unicelulares es un misterio para la ciencia, no obstante lo cual el nuevo descubrimiento es un aporte importante es ese camino, según publica la revista especializada Current Biology.