Bandes. Pidió a los funcionarios que acepten las "espléndidas ofertas venezolanas" para achicar la plantilla

Mujica: Decisiones del gobierno no apuntan a liquidación de las FFAA

En la audición «Habla el Presidente», que se trasmite por la emisora M24, el mandatario también se refirió a la crisis de Cofac con la que comenzó el gobierno de Tabaré Vázquez en 2005, y a la ayuda recibida en ese momento de parte del gobierno venezolano de Hugo Chávez.

Mujica dijo que «todo el mundo debería tener en cuenta que, hasta donde nos da el aliento, tratamos de contribuir a construir nación, respetando todos los credos, todas las razones y todos los sectores; construir nación significa aceptar la diversidad».

«Por supuesto que nuestro corazón es frentista y, por supuesto, que fuimos elegidos por una corriente notoriamente frentista. Pero por ello mismo y con ello mismo, por la diversidad conceptual que ello entraña, tenemos la necesidad de afirmar siempre que, por encima de las diferencias y a partir de respetar todas las diferencias, hay que construir permanentemente el acervo que se llama nación», afirmó Mujica.

«No podemos aceptar que el país se divida en visiones estériles de civiles y militares. No podemos aceptar la idea de que estás conmigo y sos bueno o estás contra mí y sos malo», argumentó.

«Estamos poniendo en marcha y en ejecución, recién, algunas reformas votadas en la legislatura anterior pero no aplicadas, entre ellas, las que derivan en las cuestiones militares. Pero con esos instrumentos que tenemos que cumplir, vamos a luchar por dignificar efectivamente en lo profesional, y no solo en la parada, a las Fuerzas Armadas».

«Coyunturalmente, por lo que significa la realidad de estos años, por desgracia, ineludiblemente hemos tenido que gastar mucho más en policías y en políticas carcelarias; de no hacerlo así, todo el debate electoral habría sido una farsa», indicó.

Para Mujica, «la política, a pesar de sus errores, no es una farsa en el Uruguay. Esto nos obliga hoy, nos mandata, esto es una consecuencia ineludible hoy. Estas decisiones no son resultado de una estrategia de liquidación de las Fuerzas Armadas, es una imposición de la hora, el problema de seguridad está en la calle», enfatizó.

«Pero al mismo tiempo, no podemos olvidar ni debemos olvidar la herramienta militar. El acotar su número también nos obliga a que hay que barrer con algunos privilegios y abusos, que algunos pocos incubaron, explotando la verticalidad. Eso sí está en juego, no la existencia de las Fuerzas Armadas, que por desgracia y no porque nos guste, son una necesidad vigente por las características del mundo en que nos toca vivir», apuntó.

«Hay que cuidar frontera, hay que cuidar el agua, hay que cuidar el aire, hay…hay… y siempre en el mundo en el que nos toca vivir, tener la previsión de jugar una ficha al cero, aunque más no sea por las dudas», concluyó.

 

«Espléndida oferta»

Sobre el Bandes, Mujica expresó: «Lo cierto y lo concreto es que hasta el día de hoy, el giro real de ese banco, el quehacer real de ese banco, no puede sustentar los costos de la enorme plantilla laboral que heredó. Desde el punto de vista empresarial es inverosímil. Y esto hace mucho tiempo que lo saben las autoridades técnicas bancocentralistas y, obviamente, lo saben hasta el cansancio quienes representan a los trabajadores bancarios, que las más de las veces tienen buena información técnica».

«Es un gremio de gente muy capaz y saben perfectamente que se estuvo perdiendo muchísimo dinero, pagando salarios sin contrapartidas», subrayó Mujica.

«Paralelamente, en todos esos años, pequeñas ayudas, que de alguna manera instrumentó la relación Uruguay-Venezuela, permitieron que existieran y existan hoy proyectos florecientes, de gente que se gana la vida honradamente en trabajos reales, que generan contrapartidas. Esas pequeñas ayudas dieron frutos innegables. La gran ayuda que significó sostener, por razones de solidaridad, un banco inviable ­por lo menos inviable en las dimensiones que tenía­ significó nada más y nada menos que pérdidas acumulativas», indicó.

«En la vida hay que tener memoria. Cuando se tiene memoria también se tiene sentido de reconocimiento y de agradecimiento. Todos tenemos que agradecer la mano que nos dieron, porque en definitiva si fue una mano tendida a un gobierno que arrancaba, en realidad fue al país, para evitarle un sacudón, diríamos una nueva corrida bancaria con todo lo dramático que esto significa».

«Esta es la razón central, ese banco tiene que redimensionarse, tiene que achicarse, tiene que gastar menos en salarios, tiene que tener una masa salarial acorde al giro que tiene, para que los números cierren. Así de sencillo, como cualquier boliche, como cualquier empresa».

«Por eso, tengo que pedirle por favor, por esa memoria, por todo lo que significó de ayuda al país, a los señores funcionarios bancarios que acepten las espléndidas ofertas venezolanas para achicar la plantilla laboral. Realmente son desusadas para nuestro medio y tengo que confesar: siento vergüenza que los números que se ofrecen, no conformen», opinó.

«Por otro lado, yo no sé si Chávez construye o no construye socialismo, no sé. El rumbo de Venezuela es cosa de los venezolanos. Lo que tengo bien claro, absolutamente bien claro ­y lo tengo que gritar a los cuatro vientos­ es que millones de pobres de América Latina van a comer un poco mejor y tendrán vivienda un poco mejor y más digna, sencillamente, porque este venezolano tuvo el coraje de soñar y porque a pesar de todo siguen existiendo ‘quijotes’ en este mundo, de lo contrario este mundo sería un infierno», enfatizó.

«Pero como uruguayo tengo que recordar, hay que ser como el burro y nunca olvidar donde se come y, por lo tanto, ser decentemente agradecido cuando a uno lo ayudan», recomendó el mandatario.

Te recomendamos

Publicá tu comentario

Compartí tu opinión con toda la comunidad

chat_bubble
Si no puedes comentar, envianos un mensaje