Partido Nacional “resquebrajado” por el insulto pone en duda su capacidad para dirigir el país

La interna del Partido Nacional volvió a subir de voltaje este jueves cuando Alem García remitió una nueva carta al Directorio, en la cual cuestiona los ataques de “fuego amigo” que ha recibido Juan Sartori.

En una misiva dirigida a la presidenta del Directorio del Partido Nacional, Beatriz Argimón, el dirigente del sector de Sartori expresa que el organismo partidario “niega sumariamente toda posibilidad de investigar, corregir y evitar que se sigan acordando pactos contra la candidatura de Sartori, contraviniendo toda lógica institucional que los hubiera obligado a dar una respuesta ajustada al rol de moderadores y árbitros ecuánimes de la elección interna”.

También expresa que llama la atención el tono de la carta de respuesta a su planteo inicial en la que “no se ahorraron adjetivos descalificativos y que no tiene precedentes en la historia del Partido”.

“Por eso mismo nos ratifican una preocupante ausencia de imparcialidad y distancia de lo que está ocurriendo dentro de nuestra colectividad”, expresa García.

Remarca, además, que no han hecho otra cosa que “presentar una carta poniendo en conocimiento un informe de prensa que denuncia la existencia de un pacto contra Juan Sartori”.

“Asimismo, el maltrato que hemos recibido no contribuye a la gestión de la unidad y tampoco ayuda a construir un sólido equipo político a partir del 30 de junio”, advierte.

Resquebrajados

También lamenta que “sea pública y notoria la aplicación de la ‘ley del embudo’ contra la opción política que representa Sartori, a quien se le niega cualquier posibilidad de contar con la adecuada imparcialidad y el mínimo equilibrio que merece”.

“¿Acaso no es cierto que se permitió la campaña de descrédito sistemático de parte de notorios compañeros del partido, sin que existiera ninguna exhortación a la convivencia armoniosa ni al elemental respeto?”, interroga el sector de Sartori.

A la vez, advierten: “Es precisamente ese patrón de conducta lo que pone en peligro la opción de triunfo del Partido Nacional. Una colectividad resquebrajada por el insulto y los ataques, pone en duda su capacidad para dirigir los destinos del país”.