Vázquez pidió a Mujica que explique en EEUU que la lucha de Uruguay contra el tabaco es por la salud y no un negocio

Mujica dedicó su audición radial de este martes por Radio Uruguay, a realizar algunos comentarios sobre la reunión que mantuvo el lunes a la tarde con Tabaré Vázquez.

El mandatario reconoció que hablaron sobre el litigio entre el gobierno y la tabacalera Phillip Morris, pero cuestionó con firmeza el “manejo que realizaron algunos medios de comunicación, que transforman simples especulaciones en información concreta”.

Resaltó que “es obvio que el tema del tabaco preocupa a Vázquez”, porque como consecuencia de su consumo mueren 8 millones de personas por año.

Mujica aseguró que el ex mandatario le pidió que procure “incidir” en la opinión pública de los Estados Unidos para que “entienda que la lucha de Uruguay es por la salud pública y no un asunto de negocios”.

Dijo que Vázquez le planteó que es “absurdo” lo que ocurre en el mundo, porque “ninguna guerra cuesta tanto como este vicio, que es una de las adicciones más fuertes que la gente puede tener”.

“No fueron otras las consideraciones, y nada tienen que ver con las especulaciones hechas”, remarcó.

“Libertinaje”

Mujica relato que al salir de la casa de Tabaré Vázquez en Buschental, un periodista a quien conoce y respeta, lo esperaba para pedirle información sobre lo conversado.

El mandatario aseguró que no haría declaraciones, y sólo le comentó que hablaron del “tabaco y otras cosas”, y se fue. Vázquez ya había ingresado a su casa.

“Pero me encuentro con la sorpresa, aunque ya nos estamos acostumbrando, que a partir de ese comentario, se generó un caudal de supuesta información, que en realidad es pura especulación”, cuestionó.

El mandatario aclaró que “no es que no se tenga derecho a especular, sino que las especulaciones no pueden darse como información”.

“Si esta es la conducta informativa, ¡pobre de nuestro pueblo!, ¡pobre del acervo público de la opinión pública!, añadió.

Agregó que si no se dispone de información “está bien que se especule y se establezcan hipótesis, pero ellas no deben convertirse en información sobre hechos que no acontecieron”.

“Al parecer en el Uruguay no sólo abunda la libertad de prensa, sino que se cae casi en una especie de libertinaje”, lamentó.

También dijo que “no hay que esperar ninguna autocrítica, porque parece que cierta prensa se atribuye el derecho de criticar todo lo que le parece, pero cuando se equivoca, jamás lo asume”.

“Hay gente que trabaja en prensa que cree que insistiendo con especulaciones se logra, como lo decía el ministro de propaganda nazi, Joseph Goebbels, ‘que una mentira repetida 1.000 veces se vuelve verdad’”.

El jefe de Estado ejemplificó con otros hechos donde a su juicio existió “un mal manejo de la información”.

Recordó que hace algunos años, cuando era diputado, discutió con un legislador, intercambiaron opiniones en un programa de televisión. En ese ámbito le dijo con ironía a su interlocutor: “como te digo una cosa, te digo la otra”.

“En el fondo era una pequeña broma por las contradicciones en las que estaba incurriendo. Pero pasaron algunos meses, sacaron esa expresión de contexto y lo comenzaron a pasar por cintas en televisión. Hicieron campaña, a tal punto que muchos uruguayos archivaron este concepto como una afirmación nuestra”, comentó.

También contó que cuando comenzó a ir al Palacio Legislativo en su moto “alguien inventó, con creatividad”, que un guardia al verlo llegar le había preguntado si se iba a quedar mucho tiempo, porque lo había confundido con un “mandadero”.

“Ese mismo inventor dijo que yo respondí: ‘si me dejan, voy a estar…cierto tiempo. Sin embargo, esto nunca ocurrió. Fui en moto, pero nunca me paró ningún guardia. Me aburrí de aclararlo, pero me lo dicen hasta internacionalmente, y no pierdo más tiempo en aclararlo”, relató.