ONU condena violaciones a la libertad de expresión y a la prensa en Nicaragua

El gobierno de Nicaragua confiscó recientemente suministros indispensables para la impresión de periódicos, como papeles y tintas, pero solamente a aquellos rotativos que son críticos a la administración.

Los medios afectados fueron El Nuevo Diario, el segundo más antiguo de Nicaragua, así como Metro y el portal digital Maje, todos propiedad de la empresa MD Medios. Todos dejaron de circular el pasado jueves por las presiones económicas y confiscaciones de insumos.

La Oficina de Derechos Humanos de la ONU, liderada por la expresidenta chilena Michelle Bachelet, denunció estos hechos como «violaciones a la libertad de expresión y de prensa».

Nicaragua padece una tensa crisis política y social desde abril de 2018 cuando una seguidilla de protestas y marchas ciudadanas rechazaron un grupo de reformas a políticas sociales que el presidente Daniel Ortega quería implementar.

Libertad de expresión en riesgo

“La Oficina de Derechos Humanos está muy preocupada por las restricciones a la liberad de prensa”, sostuvo el organismo que dirige la alta comisionada Bachelet.

Tras una reunión en Ginebra, dicha oficina discutió sobre  “la fuerte reducción del espacio de la sociedad civil, en particular de periodistas y trabajadores de medios de comunicación críticos con el gobierno, así como de los medios para los que trabajan”.

En un comentario remitido a la agencia EFE, Bachelet mencionó las constantes “campañas de intimidación y deslegitimación” en contra de la prensa, con acusaciones de traición a su país de por medio.

El cierre de El Nuevo Diario generó críticas y condenas por parte de la comunidad periodísticas del país así como de ciudadanos, lectores y organizaciones no gubernamentales. El gobierno retiene hace casi un año materiales importados indispensables para la impresión de sus periódicos. El anterior medio y La Prensa son los únicos dos matutinos que se venden en todo el país; todos los demás medios impresos son locales o regionales.

“El día anterior, Radio Corporación, otro medio crítico del gobierno, reportó el robo de partes de su antena principal”, dijo la Oficina de Bachelet.

«Después de casi 40 años de estar informando sin interrupción a la sociedad nicaragüense, El Nuevo Diario suspende esa labor debido a las circunstancias económicas, técnicas y económicas y logísticas que enfrenta», rezaba un editorial publicado el pasado 27 de setiembre. «Estamos conscientes de la importancia de El Nuevo Diario como medio de comunicación clave en la obertura periodísticas de varias etapas relevantes en la historia reciente de Nicaragua, desde su fundación en mayo de 1980 hasta hoy», continúa el pronunciamiento.