Trump entró a Corea del Norte y se reunió con Kim Jong Un

Donald Trump hizo historia este domingo al convertirse en el primer presidente de Estados Unidos en pisar Corea del Norte.

El magnate republicano participó de una improvisada cumbre en la Zona Desmilitarizada que separa a las dos Coreas, la famosa DMZ, junto al líder norcorano Kim Jong-un.

Se trata de un paso importante para reactivar las conversaciones sobre el proceso de desnuclearización en la península y de algo que ningún presidente estadounidense había hecho desde que ambas Coreas se enfrentaron en un sangriento conflicto entre 1950 y 1953, que concluyó con un armisticio aunque sin tratado de paz.

“Se trata de un momento histórico que pretende poner fin al conflicto en la península”, consideró Kim que calificó que el gesto de Trump de cruzar la frontera «fue valiente y demuestra su voluntad de eliminar todo el pasado adverso y de abrir un nuevo futuro”.

“El hecho que los dos países, a pesar de una larga relación de hostilidades, puedan estrecharse las manos por la paz en un lugar que simboliza la división demuestra que el presente es mejor que el pasado”, agrego Kim.

Tras el encuentro Trump dijo que estaba “orgulloso de haber sobrepasado la línea” y agradeció a Kim por la reunión. También anunció que en las próximas semanas ambos países comenzarán a celebrar reuniones de trabajo para continuar con el proceso de desnuclearización.

Retomar conversaciones

Las conversaciones entre ambos países estaban estancadas desde la última cumbre entre Trump y Kim en Hanoi, Vietnam en febrero pasado.

En aquel momento Pyongyang abogó por una desnuclearización gradual acompañada del progresivo levantamiento de sanciones, una oferta que no fue aceptada por Washington que defiende que no relajará ninguna sanción mientras el régimen no elimine sus programas nuclear, de misiles, así como de armas químicas y biológicas.

Este nuevo paso mínimo en lo físico — Trump dio 20 pasos hacia Corea del Norte—, pero importante en lo político, abre la puerta a que se retomen las negociaciones.

El papa Francisco celebró el encuentro entre ambas partes en suelo norcoreano: “En las últimas horas hemos asistido en Corea a un buen ejemplo de la cultura del encuentro. Saludo a los protagonistas con la oración y que este gesto significativo constituya un paso más en el camino de la paz no solo en la Península (coreana) sino a favor del mundo entero”, expresó.