Grupo sobre Detenciones Arbitrarias de la ONU considera desproporcionada la condena a Assange

 

El Grupo de Trabajo sobre Detenciones Arbitrarias de la ONU este viernes al Gobierno británico que libere al fundador del portal WikiLeaks, Julian Assange.

A su vez criticó severamente que el periodista australiano se una prisión de alta seguridad que no corresponde a los delitos de los que es acusado.

Esta es la tercera vez que el grupo de la ONU se manifiesta en favor de la libertad del activista que hizo posible la filtración de cientos de miles de documentos clasificados de Estados Unidos, ya lo había hecho en dos oportunidades durante sus años de asilo en la embajada de Ecuador en Londres.

La nueva pronunciación tiene lugar dos días después de que Assange fuera condenado a 50 semanas de cárcel por haber violado las condiciones de su libertad condicional en 2012, cuando pidió refugio en la embajada ecuatoriana de Londres, lugar en el que permaneció hasta el pasado 11 de abril cuando el gobierno de Lenin Moreno decidió retirarle el asilo diplomático que le había otorgado el expresidente de Ecuador, Rafael Correa.

«El derecho a la libertad del señor Assange debe ser restablecido», expresaron los expertos de la ONU, al tiempo que cuestionaron «la desproporcionada sentencia» contra el informático australiano, ya que según explican en el Reino Unido la violación de la libertad condicional «es un delito menor» y que requiere una pena máxima de doce meses de prisión.

A su vez señalan que aunque Assange infringió en efecto la libertad condicional, en la práctica siguió detenido ya que no podía salir de la embajada por temor a ser detenido a petición de las autoridades de Suecia, que lo acusaba de delitos sexuales y de allí extraditado a Estados Unidos, donde podría afrontar incluso la pena de muerte.

 

«Vale la pena recordar que la detención y la posterior fianza de Assange en el Reino Unido se relacionaron con investigaciones preliminares iniciadas en 2010 por un fiscal en Suecia. Igualmente vale la pena señalar que el fiscal no presentó cargos contra él y que en 2017, luego de entrevistarlo en la embajada ecuatoriana en Londres, suspendió las investigaciones y puso fin al caso», recuerdan los expertos.

Sobre el hecho de que Assange se encuentre en la prisión de máxima seguridad de Belmarsh señalan que ese trato «parece ser contrario a los principios de necesidad y proporcionalidad de acuerdo a los estándares de derechos humanos».

Si bien las opiniones y recomendaciones de los grupos de trabajo de la ONU no son de obligado cumplimiento para los Estados, sí representan una guía jurídica y moral altamente respetada.