ESCAPISTA

Sacerdote en fuga internacional habría sido alertado por la iglesia católica sobre acusación

De acuerdo con la investigación de un medio local de Costa Rica, la cúpula católica del país habría alertado a un sacerdote sobre una investigación en su contra. Desde entonces se fugó del país y se desconoce su paradero.

El sacerdote Mauricio Víquez era docente de dos universidades. Está acusado de violación sexual. Foto cortesía del diario La Nación de Costa Rica.
El sacerdote Mauricio Víquez era docente de dos universidades. Está acusado de violación sexual. Foto cortesía del diario La Nación de Costa Rica.

La cúpula de la Iglesia Católica Costarricense alertó, a finales de 2018, al sacerdote Mauricio Víquez sobre una acusación penal que se seguía en su contra, por una supuesta violación a un niño.

Unos días después de esta alerta, el cura huyó del país y desde entonces se desconoce su paradero, de acuerdo al medio local Semanario Universidad.

Desde entonces se le busca para notificarle y citarle a declarar, pero no ha sido posible; sin este paso cumplido, la causa quedaría sin efecto y podría prescribir quedando impune.

Víquez enfrenta nueve acusaciones canónicas (procesos morales a lo interno de la iglesia) y una de tipo penal por abusos sexuales a menores de edad. Fue notificado el pasado 7 de enero por el Tribunal Canónico de la Iglesia Católica sobre la única denuncia que podría llevarlo a pagar pena de cárcel.

Escándalo de proporciones bíblicas

Al trascender este escándalo en Costa Rica, el arzobispo de San José, la capital del país y principal diócesis, José Rafael Quirós, no pudo asistir a la cumbre que se realiza en el Vaticano sobre los abusos sexuales en el seno de la iglesia, ya que la Santa Sede le retiró la invitación mientras esté la investigación en curso.

El Juzgado Penal de la ciudad de Desamparados, San José, emitió una orden de captura internacional y es ahora buscado por la Interpol, además de de que alertaron a todas las policías nacionales del mundo.

El denunciante asegura que sufrió abusos sexuales cuando tenía 11 años de edad en la misma parroquia en donde Víquez servía.

La ley costarricense contempla que hasta los 28 años de edad una persona puede denunciar abusos sexual sufridos durante la niñez. El denunciante cumplirá esas edad en setiembre, y entonces la causa podría prescribir si no se logra atrapar al sacerdote en fuga y notificarlo.

 

Te recomendamos

Publicá tu comentario

Compartí tu opinión con toda la comunidad

chat_bubble
Si no puedes comentar, envianos un mensaje