Pasadas las elecciones, Trump fuerza la renuncia del fiscal general Jeff Sessions
"A su solicitud, estoy presentando mi renuncia”, escribió Sessions en una carta a Trump.
A horas de las elecciones legislativas, en las que los demócratas lograron recuperar el control de la Cámara de Representantes, lo cual les permite impulsar investigaciones sobre Donald Trump, el mandatario estadounidense llevó al fiscal general del país a presentar su renuncia.
Trump anunció la renuncia Sessions este miércoles, le agradeció por su servicio y presentó al sustituto interino.
We are pleased to announce that Matthew G. Whitaker, Chief of Staff to Attorney General Jeff Sessions at the Department of Justice, will become our new Acting Attorney General of the United States. He will serve our Country well….
— Donald J. Trump (@realDonaldTrump) 7 de noviembre de 2018
«Nos complace anunciar que Matthew G. Whitaker, jefe de personal del fiscal general Jeff Sessions en el Departamento de Justicia, se convertirá en nuestro nuevo fiscal general interino de Estados Unidos. Servirá bien a nuestro país», escribió Trump.
….We thank Attorney General Jeff Sessions for his service, and wish him well! A permanent replacement will be nominated at a later date.
— Donald J. Trump (@realDonaldTrump) 7 de noviembre de 2018
«¡Agradecemos al fiscal general, Jeff Sessions, su servicio y le deseamos lo mejor! Un reemplazo permanente será designado próximamente», agregó.
Poco después trascendió la carta de renuncia de Sessions dirigida al presidente, en la que dejaba claro que presentaba su dimisión “a petición suya”.
«A su solicitud, presento mi renuncia», escribió Sessions a Trump.
Nunca lo perdonó
Trump no ocultaba sus criticas a Sessions a quien nombró fiscal general cuando asumió el cargo. El mandatario nunca le perdonó a su elegido que se recusara para actuar sobre la investigación de la trama rusa que tantos dolores de cabeza le ha traído al presidente.
Sessions decidió no participar de cualquier cosa relacionada con la investigación del llamado ‘Rusiagate’, luego que investigaciones periodísticas determinaran que mintió al Senado sobre sus contactos con funcionarios rusos durante la campaña electoral.
En una reciente entrevista para la cadena Fox Trump dejó ver su enojo: “puse a un fiscal general que nunca tomó control del Departamento de Justicia, lo que parece una cosa increíble”, dijo. “Aceptó el trabajo y luego dijo: ‘Me voy a recursar a mí mismo’. ¿Qué clase de hombre hace esto?”, cuestionó.
Tras su recusación, quien asumió la investigación fue el número dos del Departamento de Justicia, Rod Rosenstein, quien tras el despido del director del FBI, James Comey, y las dudas en torno a las investigaciones sobre la trama rusa decidió nombrar al fiscal especial Robert S. Mueller, quien se ha convertido en un enemigo íntimo de Trump.
Ahora tras la renuncia de Sessions la investigación a manos de Mueller, ya no depende de Rosenstein, sino que pasa a manos del fiscal general interino que sustituye a Sessions, Matthew G. Whitaker, un fiscal que se ha mostrado detractor de la investigación del fiscal general.
Whitaker advirtió en un artículo de 2017 que el caso sobre la trama rusa estaba yendo demasiado lejos y que, si la investigación entraba en las finanzas personales del presidente, podía tratarse de una “mera caza de brujas”, la misma expresión que Trump ha usado muchas veces para referirse al Rusiagate.
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