Iñaki Urdangarin, cuñado del rey de España, ingresó a la prisión

El exduque de España Iñaki Urdangarin pasó sus primeras 24 horas en prisión. El cuñado del rey Felipe VI ingresó a primera hora del lunes en la cárcel de Brieva, en Ávila, para cumplir con la condena a 5 años y 10 meses que le impuso el Tribunal Supremo tras ser condenado por malversación, prevaricación, fraude a la Administración, dos delitos fiscales y tráfico de influencias en el marco del caso Nóos.

En el “caso Nóos” se investigó el desvío de más de seis millones de euros procedentes de fondos públicos entre 2003 y 2006 al Instituto Nóos, entidad que Urdangarin dirigió con su socio, Diego Torres, también condenado.

El marido de la infanta Cristina pasó la noche con «absoluta normalidad y tranquilidad», informaron fuentes penitenciarias a la agencia EFE. Iñaki Urdangarin está «tranquilo» y «concienciado» de que es un recluso y que le toca cumplir condena, agregaron las fuentes.

Un día después de que el Supremo confirmara la sentencia, la Audiencia de Palma, el tribunal que le condenó en primera instancia, le entregó en mano el mandamiento judicial por el que ordenaba su ingreso en prisión. El exduque podía acudir con el mandamiento a cualquier instalación penitenciaria de España.

«Un evidente trato de favor»

Urdangarin eligió una prisión de mujeres en Ávila, con un módulo especial para hombres, pero que hasta su llegada estaba desocupado. El último que cumplió condena fue el ex director de la Guardia Civil Luis Roldán.

En el pasado dicha prisión se utilizó para confidentes o presos calificados como testigos protegidos.

El sindicato de Comisiones Obreras reclamó que a las Instituciones Penitenciarias que trasladen a Urdangarin, ya que habilitar un módulo cerrado para un único interno sería «un evidente trato de favor» que no está justificado por ninguna necesidad penitenciaria.

Sin embargo las autoridades penitenciarias afirman que el nuevo recluso no ha recibido ningún trato diferenciado. Tan solo ha habido algunos cambios en su modulo, por ejemplo se ha devuelto al comedor la televisión que había sido retirada cuando el módulo estaba vacío.

Según detalla la prensa local el exduque está solo en un módulo de cinco celdas destinadas para hombres en el que recientemente se llevaron a cabo obras para mejorar la calefacción y aislamientos. Urdangarin se aloja en una celda de entre 12 y 15 metros con cama, mesa, ducha propia y su zona cuenta con un patio de 25 metros en un pabellón en el que no hay más reclusos.