Jacob Zuma acató la orden de su partido y renunció a la presidencia

Finalmnete presidente sudafricano, Jacob Zuma, acató la petición de su partido, El Congreso Nacional Africano (CNA), y renunció a su cargo.

Su partido había exigido su renuncia debido a que Zuma se encuentra envuelto en numerosos casos de corrupción y le dio un plazo de 48 horas.

«He llegado a la decisión de dimitir como presidente de la república con efectos inmediatos», comunicó en un discurso televisado realizado poco antes de la media noche, hora del fin del plazo otorgado por el CNA bajo la amenaza de forzar su salida este jueves mediante una moción de censura en el Parlamento.

Zuma, de 75 años, se mostró en desacuerdo con la decisión del partido pero comunicó que dejaría el cargo a pesar de su mandato debía extenderse hasta 2019. Aseguró que no entiende por qué su partido pidió su renuncia inmediata el martes, pero que se pliega a la voluntad de la organización.

“El CNA no se debe dividir en mi nombre”, dijo. “Serví al pueblo sudafricano lo mejor que pude”, afirmó, y agregó que para él fue un honor.

En su discurso lamentó que no se le hubiera dado una explicación sobre lo que se suponía que había hecho, por lo que consideró a la petición de dimisión, injusta.

Corrupción

La presidencia de Zuma se ha visto ensombrecida por varias acusaciones de corrupción, entre ellas la de haber garantizado acuerdos comerciales a una familia de empresarios, los hermanos Gupta, y haberles permitido tener influencia en la política, desde el nombramiento de ministros y directores de empresas estatales.

La familia Gupta fue criticada recientemente cuando una de sus compañías asumió la gestión de una granja lechera que poco después recibió del departamento provincial de agricultura un pago de 34 millones de rand (2,85 millones de dólares). Un alto tribunal ordenó en enero la congelación de todos los activos relacionados con la granja.

Este miécoles la policía sudafricana detuvo a uno de los miembros de esa familia que junto a Zuma son protagonistas de una de las más importantes investigaciones por supuesta corrupción en el Gobierno conocida como “Captura del Estado”.

El nombre hace referencia a un informe publicado en 2016 por la entonces defensora del Pueblo sudafricana, Thuli Madonsela, en el que se acusaba al presidente y a varios altos cargos de ilegalidades en la concesión de contratos públicos millonarios. Madonsela argumentaba que los hermanos Gupta, con intereses en sectores diversos como la minería, el transporte o la comunicación, tenían prácticamente bajo su poder el aparato del Estado. Su denuncia incluyó testimonios y diversas pruebas, como una declaración del ex viceministro de Finanzas Mcebisi Jonas sobre cómo uno de los tres hermanos Gupta le ofreció, en presencia de Zuma, ser titular de la cartera de Finanzas poco antes del cese de su entonces responsable, Nhlanhla Nene.

El informe de Madonsela tuvo una alta repercusión en el país y llevó a que en diciembre pasado la Justicia ordenara al Gobierno a establecer una comisión de investigación.

El mandatario está involucrado además en otros casos de corrupción.