Partido gobernante de Sudáfrica pide la renuncia al presidente Jacob Zuma

El Comité Ejecutivo Nacional del partido oficialista de Sudáfrica, el Congreso Nacional Africano (CNA), aceptó tras una extensa reunión la salida de Jacob Zuma de la Presidencia del país, salpicado por varios escándalos de corrupción.

La decisión, carece de un carácter vinculante, pero la agrupación dio un ultimátum de 48 horas a Zuma para que presente su renuncia aunque su mandato termina en 2019.

“Fueron necesarias 13 duras horas, pero el Comité Ejecutivo Nacional (CEN) del CNA decidió revocar al presidente Jacob Zuma como jefe de Estado”, informó este martes el diario británico The Times, citando fuentes no identificadas.

El secretario general del CNA, Ace Magashule dijo que el partido ha «retirado» al presidente Jacob Zuma de su cargo «por interés del país».
Zuma acordó dimitir si se le concedía un período de transición de tres a seis meses, dijo el martes Magashule, en una conferencia de prensa en Johannesburgo.

Pero el ANC rechazó la propuesta de transición de Zuma y aún se desconoce cuál será el accionar del mandatario..

«Sudáfrica atraviesa un período de incertidumbre y ansiedad como resultado del tema de transición no resuelto», dijo Magashule, y agregó que la decisión fue difícil «tomada después de discusiones exhaustivas».

No vinculante

El CNA no es capaz, por sí solo, de presionar al presidente para que dimita y la medida requiere una obligación constitucional. Por eso, la oposición en el Parlamento ha solicitado para el próximo 22 de febrero una moción de censura contra el jefe de Estado, acusado de múltiples escándalos de corrupción y una mala gestión económica.

Magashule denunció ante la prensa que el actual panorama ha sido aprovechado por maniobras oportunistas de la oposición en el parlamento, entre las cuales citó la presentación de una moción de no confianza contra Zuma, sus llamados a disolver el órgano legislativo y otros actos que calificó de desesperados.

Las reglas internas del partido gobernante establecen que todos sus miembros deben someterse a la voluntad de la formación política, pero en su prerrogativa presidencial Zuma no está obligado a renunciar; lo que sí hizo el exmandatario Thabo Mbeki tras recibir una orden similar en 2008.