Macron restablece el servicio militar obligatorio cumpliendo polémica promesa de campaña

Emmanuel Macron acaba de cumplir una de sus más controvertidas promesas de campaña, alabada por ciertos sectores y criticada por otros. Se trata de la reinstalación del servicio militar obligatorio para todos los ciudadanos que cumplan los requisitos para servir a su país en el frente de batalla.

Aunque tardó un poco más de lo prometido (en campaña dijo que en un mes insertaría la idea), el mandatario hizo el anuncio ante el aplauso de militares en la base naval de Tulón, a 850 kilómetros al sur de París. Bautizó su proyecto como «servicio nacional universal», tendrá presupuesto propio y su puesta en marcha corresponderá al trabajo interinstitucional de varios ministerios.

Sin dar muchos detalles al respecto, pero su idea es modernizar las fuerzas armadas que tienen participación en distintos puntos del planeta en donde hay conflictos bélicos.

Todos a la guerra

El servicio militar obligatorio vuelve 22 años después de que el ex presidente Jacques Chirac lo aboliera en 1996, como parte de un plan del presidente francés de fortalecer la Defensa del país.

Aún no se saben cuáles serán los lineamientos del proyecto ni qué legislaciones aplicarán, pero Macron se apresuró a aclarar que la financiación del proyecto no afectará el presupuesto militar, que tildó de «inédito» en 2018, con un incremento del 1,8 % con respecto al año anterior hasta los 34.200 millones de euros.

El próximo año agregará 1.700 millones de euros a las arcas de las FFAA, y al año siguiente 3.000 millones, para que al 2025 se le destine el 2% del PIB nacional.

En su discurso aseguró que el Ejército francés es «cada vez más una referencia» en el ámbito continental y consideró «imprescindible»colaborar en materia militar con Alemania y «esencial pese al Brexit» con el Reino Unido.