Trump a Putin: Estoy encantado de conocerlo en persona

Vladimir Putin y Donald Trump se dieron un apretón de manos por primera vez, desde el ascenso del republicano a la Casa Blanca, en el marco de la Cumbre G-20 en Hamburgo, Alemania, y volvieron a estrecharla al celebrar por fin su tan esperada reunión bilateral.

Según informó el portavoz del Gobierno ruso, Dimitri Peskov, ambos se saludaron al coincidir en la sala de sesiones y se emplazaron para la entrevista bilateral pautada para hoy a las 15:45, hora local.

Trump aseguró a la prensa que la reunión fue «muy buena» y que espera cosas «muy positivas» para Estados Unidos, Rusia y el resto del mundo.

Por su parte, Putin se mostró esperanzado en que hayan «resultados» positivos de este encuentro y se mostró «encantado» de haberse visto cara a cara por fin con su par norteamericano.

En su cuenta oficial de Twitter, Trump había afirmado horas antes que estaba deseoso de encontrarse con su par ruso, por quien sentía una admiración especial, a pesar de la presión política que la trama rusa está ejerciendo sobre su administración.

Melania Trump atrapada entre protestas

Un gran grupo de manifestantes provocaron que la esposa de Donald Trump, Melania, quedara atrapada en la residencia oficial pues un grupo de manifestantes, que protestan contra el G-20.

El incidente le impidió a la primera dama norteamericana unirse a un cronograma de actividades programado para los cónyugues de los presidentes de la cumbre, que tiene como anfitrión al esposo de la canciller alemana Angela Merkel, Joachim Sauer.

Posición volátil de EE.UU.

El día de ayer, Donald Trump visitó la ciudad polaca de Varsovia, en donde criticó la actividad «desestabilizadora» de Moscú en Ucrania y otros países, a la vez que insistió en la obligación de la OTANde defender a los países aliados contra futuros ataques, después de haberse negado a hacerlo durante la pasada cumbre de la alianza en Bruselas.

Por si no quedaron claras las críticas, el multimillonario estadounidense pidió que Moscú cese de inmediato el respaldo a «regímenes hostiles» como Siria e Irán y pidió al Kremlin apoyar a occidente frente a lo que llamó «el enemigo común», en alusión al terrorismo islamista internacional.