BRASIL

Policía Federal concluye que los audios que comprometen a Temer no fueron manipulados

La Policía Federal de Brasil concluyó que las grabaciones hechas por el dueño de la empresa JBS, Joesley Batista, que compromenten a Michel Temer, no fueron manipuladas como asegura su defensa. Mientras tanto el mandatario alcanza una impopularidad del 93%.

Policía Federal concluye que los audios que comprometen a Temer no fueron manipulados.
Policía Federal concluye que los audios que comprometen a Temer no fueron manipulados.

La Policía Federal (PF) de Brasil concluyó este viernes que la grabación entregada por el empresario Joesley Batista a la Justicia, con la conversación que mantuvo con el presidente Michel Temer en marzo de este año, no fue manipulada.

La PF, que investiga a Temer, dijo que peritos del Instituto Nacional de Criminalística encontraron más de 180 interrupciones «naturales» en el audio.

A su vez la pericia detalla que el grabador utilizado por Batista posee un dispositivo que pausa automáticamente en momentos de silencio y se acciona de nuevo cuando identifica sonido.

El abogado de Temer, Antonio Claudio Mariz de Oliveira había señalado este jueves que si la pericia de la PF no evidenciaba nada (de manipulación), sería preocupante.

La polémica grabación desató un sismo político en Brasil cuando se divulgó a medidos de mayo. A raíz de ella el Supremo Tribunal Federal (STF) autorizó que se iniciara una investigación contra Michel Temer por corrupción pasiva, obstrucción de la justicia y asociación delictiva.

En la grabación el mandatario brasileño parece avalar la compra del silencio del ex presidente de la Cámara de Diputados, Eduardo Cunha, preso y condenado a más de 15 años por corrupción. En el audio se esucha a Batista contar a Temer que pagan todos los meses a Cunha para que éste no hable, y al mandatario responder que «se tiene que mantener eso».

Tras la divulgación del audio, la defensa de Temer contrató un perito independiente que descalificó como prueba el audio y tildó de ingenua e incompetente a la Procuraduría General de la República (PGR).

«La grabación está enteramente contaminada por su discontinuidad, enmascaramientos por ruidos y largos trechos ininteligibles» sostuvo en conferencia de prensa el profesor Ricardo Molina, quien negó además que ésta fuera original y auténtica.

Molina consideró que ese audio no podría ser considerado como prueba material válida, «pues evidentemente resultó manipulada», dijo. En ese sentido cuestionó la admisión, por parte de la PGR, de una grabación «nítidamente corrompida» y sin consultar a los peritos criminales, calificando la actuación de esa fuerza como ingenua e incompetente.

Tras la conclusión de la PF, de que el audio no fue manipulado todavía no se presentó un informe formal, por lo que desde el Palacio de Planalto no brindaron una declaración. El abogado de Temer, Antonio Claudio Mariz de Oliveira dijo que «no es una verdad absoluta. Si hay un laudo diciendo que no hubo manipulación, hay otros tres diciendo que hubo. Es una cuestión de análisis y de juicio final de la autoridad responsable».

Impopularidad

Mientras la Justicia decide por el futuro de Temer la impopularidad del mandatario sigue subiendo. Una nueva encuesta de Datagolha publicada este sábado señala que su impopularidad alcanzó de 93%. La misma se basa en los datos de 2.771 entrevistados que respondieron entre miércoles 21 y el viernes 23 y tiene margen de error del 2%.

Antes de que estallara la polémica por la grabación que lo compromete Temer tenía solo un 9% de aprobación que ahora bajó a un 7%.

La gestión de Temer, quien asumió el poder tras la destitución de Dilma Rousseff es considerada mala o pésima por un 69% de la población y regular por un 23%. La mayoría de los brasileños exigen la celebración de elecciones directas e inmediatas para poder salir de la crisis política que atraviesa el país desde la salida de la presidenta constitucional.

El único presidente que alcanzó una impopularidad más alta que la de Temer fue José Sarney (1985-1990), quien en setiembre de 1989 en una crisis de hiperinflación en el gigante sudamericano cosechó un 94% de impopularidad.

Datafolha resaltó que “la popularidad del mandatario conservador, que prometió sacar a Brasil de la peor recesión de su historia a través de una serie de reformas promercado, mejora entre la población más rica, donde tiene una aprobación del 15%”.

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