Donald Trump: «Corea del Norte mostró una gran falta de respeto por China al disparar otro misil balístico»

La tensión en la península coreana continúa en escalada tras la insistencia de Corea del Norte de seguir adelante con su programa nuclear y de misiles balísticos, y las acciones de la Administración de Donald Trump en la región que son consideradas una provocación para el regimen norcoreano.

El pasado 21 de mayo, Corea del Norte lanzó una nueva prueba de misil balístico de alcance medio Pukguksong-2, que superó los 500 kilómetros de distancia y cayó en el mar de Japón, yomo respuesta, EE.UU. envió un tercer grupo de combate encabezado por portaaviones a la región del Pacífico.

En la madrugada de este lunes Pyongyang probó un nuevo sistema de defensa antiaérea y lanzó un misil balístico de corto alcance, que cayó en el mar de Japón.

Tras esa nueva prueba el presidente de Estados Unidos, Donald Trump se manifestó en su cuenta de Twitter y considero´que el nuevo lanzamiento significa «una gran falta al respeto» hacia China, uno de sus países vecinos.

«Corea del Norte ha mostrado una gran falta al respeto hacia su vecino, China, al disparar otro misil balístico… ¡pero China se esfuerza mucho!», escribió el magnate republicano.

North Korea has shown great disrespect for their neighbor, China, by shooting off yet another ballistic missile…but China is trying hard!

— Donald J. Trump (@realDonaldTrump) 29 de mayo de 2017

Por su parte, el primer ministro japonés, Shinzo Abe, afirmó que su país «no tolerará las continuas provocaciones de Corea del Norte, que ignora las repetidas advertencias de la comunidad internacional». El secretario general del Gobierno nipón, Yoshihide Suga, advirtió que los lanzamientos de Pyongyang, representan un riesgo para el tráfico aéreo en la zona, así como para los buques que navegan por el mar de Japón.

El nuevo presidente surcoreano Moon Jae-in convocó una reunión del Consejo de Seguridad Nacional para tratar el último acto del Gobierno vecino.

Mientras que el Gobierno ruso llamó a la comunidad internacional a responder con moderación ante el nuevo misil balístico lanzado por Corea del Norte: «Instamos a los países con los que trabajamos sobre el problema norcoreano a mostrar moderación», dijo el viceministro ruso de Exteriores, Vladimir Titov, quien además expresó su fuerte condena a este nuevo ensayo balístico, el noveno en lo que va de año.

Corea del Norte por su parte ha asegurado en diversas ocasiones que las pruebas de misiles y nucleares son de carácter defensivo ante la amenaza de Estados Unidos y sus aliados en la región que promueven la inestabilidad y la tensión en la zona.

«Una guerra con Corea del Norte sería catastrófica»

Poco antes del último lanzamiento de misil de Pyongyang, el secretario de Defensa de EE.UU, James Mattis advirtió que una guerra con Corea del Norte sería «catastrófica» y «probablemente el peor tipo de guerra en la vida de la mayoría de las personas».

En una entrevista con la cadena estadounidense CBS, el funcionario estadounidense se mostró preocupado por el poderío militar del régimen de Kim Jong-un.

«El régimen de Corea del Norte tiene cientos de cañones de artillería y lanzacohetes que pueden alcanzar a una de las ciudades más densamente pobladas del mundo, como es la capital de Corea del Sur», destacó Mattis.

Y aseguró que «el régimen es una amenaza para la región, para Japón, para Corea del Sur», y advirtió que es también una amenaza directa para los Estados Unidos «y en el caso de una guerra, afectaría a China y a Rusia, también».

Mattis se mostró preocupado por los constantes ensayos balísticos de Pyongyang, que hacen que las capacidades militares del régimen «mejoren con cada test».

«La conclusión es que sería una guerra catastrófica, si esto se convierte en un combate y si no somos capaces de resolver esta situación por medios diplomáticos», afirmaba el secretario de defensa.