Theresa May elevó de «grave» a «crítico» el nivel de amenaza terrorista en Reino Unido

La primera ministra británica, Theresa May elevó el nivel de amenaza terrorista en el país de «grave» a «crítico», y anunció un despliegue de fuerzas armadas en respuesta a esa elevación.

May calificó a la medida «proporcionada y apropiada», luego del atentado que tuvo lugar en la noche del lunes en el Manchester Arena durante un concierto de la cantante Ariana Grande.

«En el contexto del atentado en Manchester se aprobó la decisión de aumentar el nivel de la amenaza terrorista de grave a crítico», declaró May tras una reunión de emergencia del comité COBRA para analizar el atentado. Mientras que la campaña electoral de cara a las elecciones legislativas del 8 de junio fue cancelada hasta nuevo aviso por todos los candidatos.

«No podemos ignorar la posibilidad de que un grupo más amplio de individuos esté vinculado con el atentado de Mánchester», afirmó la británica, sin excluir que grupos organizados hayan sido los responsables.

El atentado, que dejó al menos 22 personas fallecidas y más de 50 heridos, fue reivindicado el martes por el Daesh (autodenomiado Estado Islámico).

La primera ministra británica dijo que aumento del nivel de amenaza terrorista en el país «significa que un nuevo atentado no solamente es posible, sino inminente».

Reino Unido utiliza desde el 2006 un sistema de alerta por amenaza terrorista que comprende cinco niveles: bajo, moderado, substancial, grave y crítico. Tales grados son establecidos con ayuda de la Inteligencia británica y en función de las capacidades e intenciones de potenciales terroristas, así como de la probabilidad de un ataque en el corto plazo.

Esta es la tercera vez en la historia que se toma la decisión de elevarla al grado máximo. La primera vez se activó durante tres días en agosto de 2006, luego de que se descubriera un plan para detonar explosivos líquidos en vuelos transatlánticos desde Reino Unido; y la segunda se activó por cinco días y fue en junio de 2007, después de que fuesen frustrados atentados con bomba en Inglaterra y Escocia.

Operación Temperer

Ante ese inminente nuevo ataque la premier británica anunció que en muchas localidades clave «las fuerzas militares suplantarán a las policiales».

«La Operación Temperer entra ahora en vigor», dijo May tras obtener la aprobación del ministro de Defensa británico, Michael Fallon.

La Operación Temperer es un plan que contempla el despliegue de hasta 5.000 soldados en las calles de varias ciudades británicas, al igual que en otros puntos clave y eventos multitudinarios.

Por su parte, Mark Rowley, el jefe de la división contra terrorismo del Servicio de Policía Metropolitana de Londres, indicó que dicha operación forma parte de un plan «acordado y bien ensayado», según el cual «el personal militar permanecerá bajo el mando y control del servicio policial».

«La gente está viendo un incremento de la presencia policial en toda el área de Gran Mánchester durante este día, y esta tendencia continuará», adelantó el jefe adjunto de la Policía de Mánchester, Ian Pilling.