ESPAÑA

«No es un partido, es una mafia», españoles protestan contra el PP de Rajoy

Mientras el presidente del Gobierno español, Mariano Rajoy se encuentra en Uruguay para promover el acuerdo de libre comercio entre la Unión Europea y el Mercosur, los españoles salen a las calles para decir basta a la corrupción que salpica al gobernante Partido Popular.

"No es un partido, es una mafia", españoles protestan contra el PP de Rajoy.
«No es un partido, es una mafia», españoles protestan contra el PP de Rajoy.

Centenares de personas se concentraron en la noche del martes frente a la sede nacional del PP, en la calle Génova de Madrid, para protestar con una sonora cacerolada tras los nuevos casos de corrupción.

La convocatoria fue realizada de manera espontánea a raíz de los casos de corrupción que envuelven al partido de Rajoy y se comenzó a difundir por las redes sociales bajo el hashtag #MadridsinMafia. La movilización ha sido apoyada desde la oposición por Podemos e Izquierda Unida.

Entre los reclamos de los manifestantes se escuchaba en relación al PP «No es un partido, es una mafia», «que el PP se disuelva y entregue la pasta», y carteles con frases «fuera ladrones de las instituciones», «el más corrupto o más tonto es Rajoy», «tu sobre mi recorte», «tu botín, mi crisis», entre otras.

Los casos

El pasado lunes la ahora exportavoz del PP en el Ayuntamiento de Madrid, Esperanza Aguirre, presentó su renuncia, luego de que se decretara la prisión incondicional para quien fuera su sucesor al cargo de la Presidencia de la Comunidad de Madrid y hombre de la máxima confianza, Ignacio González por la «Operación Lezo».

Además, la semana pasada el propio presidente del Gobierno, Mariano Rajoy, fue citado por la Audiencia Nacional para declarar como testigo en el juicio de la trama Gürtel, el más grande escándalo de corrupción que enfrenta España, porque, según el auto «el Partido Popular se negó a prestar ninguna declaración respecto de los hechos». La acusación considera que el presidente del Ejecutivo español fue secretario general del partido en esa época y, por tanto, debía conocer las actividades del extesorero del PP, Luis Bárcenas, quien es el principal imputado en la causa.

Rajoy le restó importancia a la citación y aseguró que se trata de «un acto de pura normalidad». Se trata de la primera vez que un presidente del Gobierno es llamado en democracia a declarar mientras ejerce su cargo en España.

Lejos de pasar la tormenta por los recientes escándalos de corrupción que salpica al gobierno, ésta se intensifica. La Cadena Ser asegura el fiscal Anticorrupción, Manuel Moix, apartó del caso al fiscal encargado de investigar a Ignacio González, Carlos Yáñez lo que despertó la furia de la oposición.

El secretario de Organización de Podemos, Pablo Echenique consideró que «es una vergüenza, sobre todo en esta semana fatídica, que los ciudadanos y ciudadanas vean cómo el Estado en vez de perseguir a los corruptos, les protege».

Poco después la Fiscalía emitió una nota oficial negando que Moix lo haya apartado del caso. La nota añade que contrariamente se ha pedido su renovación, pero que ha sido Yáñez quien ha pedido renunciar a su puesto en Madrid y regresar a Granada, y que será este viernes cuando él le de su respuesta definitiva al respecto.

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