Trump dijo que espera que Corea del Norte quiera la paz, pero no descarta una guerra nuclear

El presidente de EE.UU., Donald Trump manifestó su esperanza de que se produzca una solución pacífica respecto a la situación en la península coreana, aunque reconoció que la amenaza de una guerra nuclear con Corea del Norte existe.

«Esperemos que él [Kim Jong-un] quiera la paz, y nosotros queremos la paz, y esta será la determinación final, pero vamos a tener que ver qué pasa», dijo el magnate republicano en entrevista con la cadena TMJ4-TV.

Consultado sobre cuál es la preocupación real que deben tener los estadounidenses sobre la posibilidad de una guerra nuclear con Corea del Norte, Trump dijo que «siempre hay que estar preocupado cuando no sabes exactamente con quién estás tratando».

El mandatario se refirió a su reunión con el líder chino Xi Jinping y la calificó de positiva ya que China tiene bastante «influencia sobre Corea del Norte», por lo que espera que pueda colaborar a calmar la tensión, aunque ya advirtió en otras ocasiones que si otros países no colaboran EE.UU. resolverá la situación unilateralmente.

También consideró que la situación de tensión actual que existe entre EE.UU. y Corea del Norte se debe en gran parte a los anteriores mandatarios estadounidenses que han rechazado y aplazado el problema norcoreano, que se remonta al mandato de Bill Clinton. A su entender él ha heredado «una situación muy compleja».

«Ahora me encuentro en una situación en la que él (Kim Jong-un) tiene armas nucleares, hay que hacer algo con esto», afirmó.

¿La flota de EE.UU. que potenció la tensión nunca se dirigió a Corea?

Las tensiones en la península de Corea se incrementaron visiblemente la semana pasada cuando EE.UU. envió a la región un grupo naval encabezado por el portaviones USS Carl Vinson, lo que provocó nuevas amenazas por parte de Pyongyang.

El presidente de Estados Unidos afirmó a la prensa «estamos enviando una armada, muy poderosa. Tenemos submarinos, muy poderosos. Mucho más poderosos que el portaaviones. Eso es lo que te puedo decir».

Por su parte el secretario de prensa de la Casa Blanca, Sean Spicer dijo que la flota estaba siendo desplegada en el Mar de Japón como una «demostración de fuerza» en respuesta a las pruebas con misiles llevadas a cabo por Corea del Norte, para demostrar las opciones de Trump en la región.

Sin embargo unas imágenes publicadas por la propia Marina estadounidense demuestran que la enorme flota militar de EE.UU. no se dirigía en ese momento a Corea del Norte, sino que navegó en la dirección contraria.

Las imágenes, tomadas el pasado 12 de abril muestran concretamente que la flota iba de camino al Océano Índico, a más de 5.600 kilómetros de su supuesto destino, a participar en unos ejercicios militares con la Marina de Australia.

Este martes el Comando del Pacífico del ejército de EE.UU. confirmó que, tras partir de Singapur el 8 de abril, la flota completó el entrenamiento programado en la costa noroeste de Australia, y agregó que ahora «se está dirigiendo a Pacífico occidental, según lo ordenado».

Ahora lo que falta determinar es si la comunicación primaria de la Casa Blanca trató de engañar a la opinión publica para asustar la líder norcoreano Kim Jong-un, si existió un cambio de plan o si faltó comunicación entre las partes.

Sanciones

El secretario del Tesoro de EE.UU., Steven Mnuchin, dijo este lunes que Washington planea imponer más sanciones contra una serie de países.

En ese sentido detalló que «habrá más sanciones contra Corea del Norte» que afectarán a los ciudadanos y empresas del país, y adelantó que por el momento no se planea sancionar a las empresas chinas que tienen negocios con los norcoreanos, ya que Washington mantiene «discusiones productivas» con los homólogos chinos en este ámbito.

A finales de marzo EE.UU. introdujo sanciones contra 11 ciudadanos de Corea del Norte y una empresa del país en relación con su programa nuclear.